La autopsia al cuerpo de Kim Gómez, la nena de siete años asesinada por dos delincuentes, de 14 y 17 años, en la ciudad de La Plata, indicó que la menor falleció como consecuencia de las lesiones sufridas al ser arrastrada unas 15 cuadras en el auto que robaron los ladrones.
Fuentes judiciales informaron que los peritos concluyeron que la niña tuvo un shock hipovolémico por los graves golpes.
En tanto uno de los ladrones detenidos indicó que intentaron arrojar a la menor del auto, señaló que quisieron tirarla por la ventana.
Ahora la fiscal Carmen Ibarra deberá decidir la suerte de ambos implicados, al tiempo que el informe forense se incorporó al expediente.
A su vez se espera una multitudinaria marcha para la tarde, la misma concluirá en Plaza Moreno (12 entre 51 y 53), estará presente el padre de Kim y se solicitó llevar una vela encendida como ofrenda.
El dolor indescriptible de un padre
Hoy, más temprano, el padre de la Kim habló con la prensa y afirmó que "la nena gritaba y la escucharon todos" y deseó: "Ojalá los acusados sufran mucho".
Marcos Gómez expresó su dolor por la muerte de su hija y pidió: "Me gustaría que los padres de los asesinos se comuniquen conmigo. Estoy destrozado".
El padre de la menor señaló: "Los ladrones agarran a la madre en un semáforo de 25 y 72, la tiran al piso, se meten y se van con el auto. Kim estaba en el asiento del acompañante y cae en 22 y 72".
"Por algún motivo se cae y la arrastran. Tenemos fotos y videos de cómo la arrastran estas dos personas", indicó, y criticó: "Me pregunto qué mierda pasa. Supongamos que esta gente se quería robar el auto, ¿no vieron a la nena? No les importó, frenen y bájenla. Roben tranquilos y ya está, perdimos".
En este sentido, Marcos, entre lágrimas, manifestó que "no puede entender" cómo los malvivientes no detuvieron la marcha del vehículo y apuntó contra las familias de los dos menores de 14 y 17 años, ambos detenidos por el crimen de Kim: "¿Qué criaron, loco? ¿Cómo se puede defender, qué puede hacer?".
Por su parte, afirmó que la víctima "gritaba" y "la gente escuchó" lo que pasaba.
"Me gustaría que los padres respondan por sus hijos. Estoy destrozado, tenía una hija perfecta que siempre amé. Me la arrebataron", agregó el hombre.
El hombre manifestó que "le gustaría" que los imputados "sufran un poco" como "sufre" él.
"Kim era una nena inocente, ordenada, estaba lleno de amigos y hacía muchas actividades. La llevábamos a un ambiente para que juegue y se divierta".
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