La tormenta de Santa Rosa impactó con fuerza durante la madrugada en gran parte de la provincia de Buenos Aires, pero golpeó con más intensidad en todo el conurbano, donde se registraron fuertes vientos, intensas precipitaciones y en algunas regiones huzo caída de granizo.
En el AMBA ayer sábado el cielo amaneció cubierto con tormentas, humedad del 93%, viento este a 14 km/h, una temperatura de 10.9 grados y una máxima que llegó a los 12º.
Las precipitaciones irán perdiendo intensidad desde este domingo.
Según el informe del Servicio Meteorológico Nacional, entre la medianoche del viernes y las 7 de la mañana del sábado, el agua acumulada en el Conurbano fue de 67,9 milímetros, a poco del promedio de todo agosto que fue de 70 milímetros.
El organismo anunció que las precipitaciones bajarán su intensidad este domingo en el AMBA. Apenas habrá lloviznas hasta la madrugada y con cielo mayormente nublado para lo que resta del día. La temperatura será de 10º de mínima y 16º de máxima.
El campo
La lluvia caída en el interior de la provincia de Buenos Aires, sobre todo en la zona núcleo, fue recibida con satisfacción por parte de los productores agropecuarios, que ya mostraban preocupación por la falta de agua para el trigo.
De acuerdo con distintas estimaciones, buena parte de los lotes sembrados con trigo comenzaba a mostrar signos de desmejora por la falta de agua, situación que ya se vivió en los ciclos agrícolas anteriores, con una de las más profundas y extensas sequía que afectó la producción en buena parte del país.
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