Ángel Pascual Ramos (24) es el más complicado de los seis acusados por la violación grupal en Palermo y ayer declaró en el juicio oral. El imputado se refirió al hecho ocurrido en la zona de Plaza Serrano en febrero de 2022 como una relación sexual “mutua y consentida” y dijo que fue un “error” tener sexo en un auto estacionado en la calle.
Ramos está detenido en la cárcel de Ezeiza.
Durante su declaración, el acusado se sintió mal y debió recibir asistencia médica dentro Penal de Ezeiza, al tiempo que reiteró su inocencia, según informaron fuentes judiciales a Télam.
Ramos aseguró que él no abusó de nadie ni hizo “nada ilegal” y explicó que se trató de una relación sexual “mutua y consentida”. A su vez, consideró que probablemente el “error de ambos” fue haber ido a un auto estacionado en la calle.
Ramos -de los seis acusados el más complicado por los peritajes de ADN y por los videos- ya había dado su versión de los hechos ante los jueces Gabriel Vega, Gustavo Valle y Domingo Altieri en la primera jornada del juicio realizada el 28 de agosto.
Aquella vez dijo que él no conocía a los otros cinco coimputados, que no violó a la joven y que “no hubo un plan para abusar de nadie”.
Según la investigación, las imágenes de los videos lo identifican a Ramos como el primero en abusar de la denunciante en el asiento delantero del auto, y su perfil genético fue identificado no sólo en el líquido seminal hallado en la ropa interior y en los hisopados practicados a la víctima, sino también bajo las uñas de la chica, lo que para la fiscalía indica que ésta se resistió al acto sexual y llegó a rasguñarlo.
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