“El sueño de la casa propia” y una estafa por millones, al descubierto
Dos mujeres se hacían pasar por empleadas de la Comuna y pedían dinero a cambio de trámites de adjudicación de viviendas
Todo se derrumbó como un castillo de naipes. La ilusión, el sueño de la casa propia, en estos tiempos tan complejos, se convirtió en una verdadera quimera. Todo producto del accionar de dos mujeres, que ayer quedaron detenidas en Ensenada bajo sospecha de estafar al menos a seis personas, aunque la lista de damnificados podría llegar a las 200.
De acuerdo al reporte oficial, las imputadas, identificadas por la Policía como Mónica Patricia Peral (57) y Sandra del Valle Sosa (49), se hacían pasar por funcionarias de la Comuna y, bajo ese ardid, recibían dinero a cambio de la adjudicación de viviendas en el Barrio Federal II, sito en la calle Contarelli entre Quintana y Maipú.
También se habrían arrogado funciones como secretarias del Jefe Comunal y, otros importantes funcionarios de la vecina ciudad, a lo que le sumaron documentos membretados para darle un mayor grado de certeza a la maniobra. Al parecer, los estafados entregaron una suma inicial de 250.000 pesos y después quedaba comprometidos al pago de 50 cuotas de 25.000 pesos cada una, lo que hacía un total de 1.500.000 pesos por unidad.
La investigación recayó en la fiscalía N° 17, a cargo de la doctora María Eugenia Di Lorenzo, quien solicitó las órdenes de allanamiento, que terminaron con la captura de las señaladas como autoras de la presunta estafa. Fue personal de la DDI el que realizó los operativos y logró además el secuestro de 439.000 pesos, dos teléfonos celulares, logos del partido de Ensenada, dos cuadernos, una notebook y anotaciones varias, por la suma de 1.900.000 pesos, entre otros elementos de interés para la pesquisa.
Voceros del caso mencionaron que “de tareas investigativas se estableció que existe un proceso penal paralelo donde se estudia un hecho con la misma conducta delictiva y las mismas protagonistas”. Incluso, trascendió que al momento del ingreso a uno de los registros, había personas que estaban firmando y gestionando la adquisición de viviendas, a través de la firma de distintos documentos, las cuales fueron debidamente identificadas en el expediente judicial.