Un grupo de personas usurpó ayer una vivienda de calle Iberlucea, aprovechando la ausencia de los moradores, que habían salido a hacer unos mandados. Además habían sacado los muebles del interior a la vía pública, con claras intenciones de quedarse.
Ante esta situación, los vecinos y damnificados del barrio La Vaca se comunicaron al servicio telefónico de emergencia 911 para alertar lo que estaba sucediendo y, rápidamente, unos cinco patrulleros arribaron al lugar del hecho.
Al llegar al lugar, los efectivos policiales se encontraron con una escena particular: los habitantes de ese sector de la ciudad se habían unido para desalojar el domicilio en cuestión, con palos y piedras, acción que dio resultado.
Tras varios minutos de tensión y resistencia, los usurpadores abandonaron la casa y el barrio recobró la normalidad, después de las 20. Los damnificados volvieron a ingresar.
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