Desde las 11 de ayer, el Hospital Municipal “Doctor Rubén Omar Miravalle” de Lincoln permaneció vallado y con custodia policial debido a una amenaza de bomba recibida a través de un llamado telefónico.
Fuentes oficiales informaron a La Posta que “una recepcionista denunció haber recibido un llamado al teléfono fijo de la guardia del hospital, donde una voz femenina le había referido que había una bomba, y que corran por sus vidas”.
De esta manera, se aplicó el protocolo correspondiente y se procedió a la evacuación del edificio y se solicitó la presencia de peritos de explosivos de Bomberos de Junín. Tomó intervención el juez federal Rueda. Se instruyó un sumario caratulado “Intimidación pública”.
INTERVINIERON PERITOS EXPLOSIVOS DE JUNÍN
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