En la tarde de ayer, un solitario delincuente que circulaba a bordo de una bicicleta detuvo su marcha en Coronel Suarez al 350, entre Julio Campos y Carlos Tejedor donde descendió con la intención de cometer un robo en un comercio.
El hombre ingresó a la farmacia Nuestra Señora de Fátima, donde amenazó a la trabajadora y le exigió el dinero de la caja registradora, además diciendo que debajo de su campera tenía un arma de fuego.
Tras un mal momento de tensión que se vivió dentro del local, la mujer accedió al pedido del malviviente y le entregó la recaudación del día al asaltante que estaba encapuchado con el rostro cubierto.
El “bicichorro”, luego, subió a su vehículo, estacionado en la vía pública, y huyó por Coronel Suarez con dirección a calle Posadas.
Rápidamente, la victima llamó al 911 y dio aviso a las fuerzas de seguridad que no tardaron en arribar al lugar del hecho ilícito. En un estado de nerviosismo, por la situación que le toco vivir, pudo aportar algunos datos sobre la vestimenta y contextura física del malhechor.
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De inmediato, varios móviles policiales montaron un operativo cerrojo para tratar de interceptar al sujeto en cuestión por el barrio, pero al cierre de esta edición aun no había podido ser detectado.
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