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El hombre fue sacado de su casa con una fuerte custodia policial.
EN EL BARRIO RICARDO ROJAS

Más de cien policías frenaron una pueblada contra un hombre acusado de violación

Balas de goma, piedras, gases lacrimógenos y palos fueron protagonistas de una furiosa noche donde vecinos intentaron ajusticiar al sujeto. Más temprano, una mujer había denunciado que su hija de 7 años tenía marcas en su cuerpo por un presunto abuso sexual.

En horas de la noche de ayer, decenas de vecinos del barrio Ricardo Rojas intentaron hacer justicia por mano propia contra un hombre sospechado de ser el autor de un abuso sexual del que, según denunciaron, fue víctima una menor de edad.
Es que unas horas antes, en la tarde, personal del Comando de Patrullas se había presentado en una vivienda ubicada en calle Lebensohn al 1400 (y Martín Fierro), donde la madre de una nena de 7 años denunció que en el momento en que se encontraba bañando a su hija observó varias lesiones corporales.

Luego de la denuncia efectuada por la progenitora en una dependencia policial, los efectivos ordenaron el inmediato traslado de la menor y su madre al Hospital Abraham Piñeyro para ser examinada por los facultativos.
Más tarde, ya cerca de las 22, vecinos comenzaron a rodear la vivienda del sujeto a quien quisieron linchar. Según pudo observarse, el hombre se encontraba en su casa con varios menores y su concubina.

Rápidamente, el Grupo de Infantería, GAD y más de 100 efectivos de la fuerza pública intervinieron en lo que se estaba convirtiendo en una pueblada a menos de tres cuadras del lugar donde fue asesinada la niña Camila Borda por el ahora condenado a reclusión perpetua, José Carlos Varela quien, además abusó de ella antes de matarla. 
La furia de los vecinos empezó a sentirse con más violencia cuando los primeros piedrazos y palazos comenzaron a caer contra la casa del sospechoso y la intención de prenderla fuego estaba latente en el ambiente. Entonces comenzó la transmisión en vivo del fotógrafo de Democracia durante más de media hora por el canal de Facebook de este medio, donde quedaron plasmados los momentos de tensión.

Fue ahí cuando se empezaron a escuchar los disparos de las escopetas cargadas con balas de goma que se ejecutaban por el personal policial protegido detrás de los escudos reglamentarios. Seguidamente empezaron a volar las primeras granadas de gases lacrimógenos para dispersar a los furiosos vecinos, entre los que se encontraban mujeres y hombres.
Tras una hora de tensión, los efectivos pudieron sacar al hombre, que se hallaba resguardado en el domicilio de calle Lebensohn y fue conducido con rapidez a una comisaría jurisdiccional. 

La tensión duró por unas horas más y, al cierre de esta edición, un perímetro policial procuraba mantener la calma y evitar el incendio de la vivienda.  
Según detallaron, desde el centro asistencial al que fue trasladada la nena de 7 años, se comunicó la situación a la Fiscalía N° 6 que dispuso el secuestro de las prendas de vestir y el inicio de una IPP caratulada “abuso”. Personal de la Comisaría de la Mujer y la Familia también tomó intervención en el caso.

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