Mujer mató a su hijo a martillazos
Un llamado al 911 en Mar del Plata daría a conocer la historia cargada de horror que ocurrió en una casa ubicada en Vertíz 5369 de la ciudad costera: "Ayúdenme, me parece que maté a mi hijo a martillazos", se escuchaba del otro lado de la línea. Quien realizó el llamado fue Cintia Leiva, madre de Axel Nicolás Llevia, a quienes los policías encontraron sin vida sobre la cama de uno de los cuartos de la casa, con dos fuertes golpes en la sien y en la nuca. El episodio ocurrió cerca de la medianoche, cuando el joven de 20 años fue atacado durante una discusión por su mamá, de 36. Luego de lo ocurrido, la mujer -que también es madre de dos pequeños de 10 y 6 años- salió de su casa y gritó para pedir ayuda a sus familiares y vecinos. Un joven de 20 años fue asesinado a martillazos en la cabeza en una vivienda del barrio Cerrito de la ciudad de Mar del Plata y por el hecho fue detenida su madre, quien confesó el crimen ante los efectivos policiales, a los que ella misma llamó. Dura historia Vecinos de la zona contaron que detrás del filicidio hay una “dura historia de vida”, ya que la mujer de 36 años crió en soledad a su hijo, quien padecía severos problemas psiquiátricos y que si bien ella tiene otra pareja, con la que tuvo dos niños, siempre le dispensó muchos cuidados a la víctima, quien tenía inconvenientes de conducta y solía actuar con violencia. El trágico hecho ocurrió en la vivienda del fondo del terreno de la calle Vértiz al 5300 de esa popular barriada marplatense, tras escucharse gritos entre madre e hijo y luego el llanto desconsolado de la mujer. En medio de la conmoción y al haber confesado el homicidio, la mujer quedó aprehendida y los peritos secuestraron el martillo que habría sido utilizado para aplicarle los golpes letales al joven en la cabeza. De inmediato, la madre del asesinado quedó alojada en el destacamento femenino de la Unidad Penal de Batán. Durante la indagatoria del fiscal Juan Pablo Lódola -quien la imputó, en primera instancia, por el delito de “homicidio agravado por el vínculo”- la mujer se descompensó y se debió suspender la audiencia. Cintia Leiva tuvo a su hijo, en 1998, cuando apenas tenía 16 años y debió criarlo en soledad, ya que el padre desapareció. Se instaló en la parte del fondo de la casa de su hermana, en el mismo lugar en que ahora ocurrió este desgraciado episodio. Luego rehízo su vida, siempre junto al niño, estableció una nueva pareja y tuvo otros dos chicos (hoy de 10 y 6 años), formando una familia, que siempre pasó muchas necesidades.