Los allanamientos en dos establecimientos de la zona rural de El Triunfo, Partido de Lincoln, tiene que ver, de acuerdo a las pesquisas que se vienen realizando, con un intento de asesinato que se produjo en Mar del Plata, una herencia por diez millones de dólares y conflictos familiares.
Ello quedó reflejado en medios de prensa de Mar del Plata y uno de ellos, el diario “La Capital”, informó que todo se inició en esa ciudad balnearia el 29 de junio de 2014, día en el que murió el septuagenario Reinaldo Bensi, dueño de campos y de otras propiedades en el vecino Distrito linqueño.
El citado, falleció después de haber permanecido convaleciente durante varias semanas por un accidente vial, y dejó un enorme patrimonio que una mujer cercana al extinto, mucho más joven que Bensi, judicializó a través de un abogado de Mar del Plata.
La mujer, fue aprehendida el viernes junto a su actual pareja, un efectivo policial en servicio, en el marco de la investigación por el ataque sufrido por el abogado a cargo de realizar la sucesión de los bienes, quien había sido baleado en el rostro el 15 de junio último, en su estudio céntrico de la "Perla del Atlántico".
Por lo investigado, para el fiscal que lleva adelante la causa existen pruebas suficientes para imputar a la mujer, de 42 años, por la agresión sufrida por el abogado marplatense Carlos Castillo.
Los motivos son una herencia que ronda los diez millones de dólares y quien habría efectuado el disparo, cuando el letrado estaba reunido con la mujer, es un sujeto que irrumpió en el estudio, armado con un revólver, huyendo luego del lugar.
En el marco de esta investigación, se solicitaron tres allanamientos en domicilios de Mar del Plata y otros tantos en campos de la zona rural de El Triunfo, que son las mayores propiedades que dejó Bensi y que están involucradas en la sucesión.
En una de las requisas en Mar del Plata, fueron detenidos la mujer y su actual pareja, un policía en actividad, quedando la marplatense acusada de coautora del delito de "tentativa de homicidio", mientras que el hombre quedó a disposición del fiscal actuante por "tenencia ilegal de armas".
Todavía no se estableció quién disparó contra el abogado Castillo, aunque se cree que, en su declaración ante la Justicia, la mujer podría dar datos importantes y también, aportar nuevos elementos que harían aún más sorprendente este hecho.
Al parecer, la ahora entre rejas era la única heredera -compartiendo ese beneficio en un pequeño porcentaje con el apoderado del millonario- y contrató al letrado Castillo.
Las razones por las cuales Bensi eligió a la mujer como depositaria final de todas sus propiedades aún hoy es materia de investigación.
Según estimaciones extraoficiales, el monto de la sucesión ronda los diez millones de dólares entre departamentos, casas, vehículos y los campos de El Triunfo.
Esa millonaria cantidad de dinero hizo necesaria la discusión de honorarios para Castillo y otros detalles de la labor profesional, algo que con el transcurso de los meses empezó a generar controversia.
Esto es lo que investiga el fiscal como móvil del ataque que se produjo aquella tarde del lunes 15 de junio. Según consta en el expediente, el abogado había acordado encontrarse con la mujer fuera del horario de atención de su estudio para definir algunas cuestiones vinculadas al trámite judicial.
Aunque el abogado no confiaba en esa clienta, la recibió en su oficina y mantuvieron una charla breve. El diálogo se interrumpió cuando la señora pidió ir a ver a su hija, que supuestamente estaba en el automóvil. Pero no fue ella quien regresó a los pocos segundos, sino un sujeto armado con un revólver calibre 22 y, a los gritos, intentó disparar contra Castillo, pero éste pudo correr hasta un baño.
Decidido, el agresor lo siguió y dentro del sanitario le efectuó un disparo. Castillo, de 69 años, tuvo dos reacciones que le salvaron la vida. La primera de ellas fue haberse cubierto con sus manos la cabeza.
El proyectil atravesó un brazo del abogado y perdió potencia, pese a lo cual se incrustó en su mandíbula. El segundo acto reflejo fue haberse hecho pasar por muerto, mientras que el agresor, de acuerdo a los dichos del lesionado, "Se reía mientras me disparaba”, pudo declarar Castillo, a quien le quedaron secuelas del ataque, especialmente al hablar, aunque felizmente se recuperó del brutal ataque.
Los forenses determinaron que el arma empleada fue un revólver calibre 22, se incriminó a la mujer y se solicitaron los allanamientos, que se realizaron en Mar del Plata y en los campos de El Triunfo.
A la mujer y el hombre que es su compinche, los detuvieron en la casa que compartían en la ciudad balnearia y allí se secuestraron celulares, computadoras, documentación y tres armas de fuego: Un revólver calibre 32 y dos pistolas calibre 22, ninguna de las cuales coincide -en principio- con la que habría sido utilizada para cometer el ataque.
Ahora resta que la mujer preste declaración ante la Justicia, lo cual podría arrojar un poco de luz a una causa que bien podría emparentarse a una novela de trama policial, que cubren con gran despliegue los medios de prensa de Mar del Plata y de Lincoln, entre ellos "La Posta del Noroeste".
OSCURA TRAMA DETRÁS DE VARIAS REQUISAS
Herencia de unos diez millones de dólares detrás de los allanamientos en El Triunfo
Un amplio operativo policial se realizó por un intento de asesinato, en esa población de Lincoln y en la ciudad de Mar del Plata.
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