Un punto de inflexión
Esta semana, el fiscal Luciani pidió doce años de condena para la Vicepresidenta por la Causa Vialidad, en la cual está siendo juzgada. Mi pregunta en esta instancia es si esto puede llegar a determinar un cambio radical en los procederes de la clase política que asume el poder y que en vez de utilizar ese poder en gestionar políticas que se utilicen para mejorar la calidad de vida de todos, lo utilizan para realizar negocios espurios, amparados por ese poder otorgado por los ciudadanos.
Creo fuertemente que esta es una de las causas fundamentales de la decadencia de la Argentina, la pérdida de valores y conductas de las personas que detentan el poder en nuestro país nos han llevado a esta crisis que hoy vivimos.
En este punto se debe aclarar que la vicepresidenta no es la única, dentro de la clase política, que está acusada de cometer ilícitos. Hay una lista bastante larga de políticos que han sido acusados, de distintos colores políticos. Por eso creo que todos debemos reflexionar sobre qué nos está pasando como sociedad y por qué hemos perdidos valores éticos que antes teníamos.
Otro tema que me preocupa con esta situación y donde creo que todo el arco político y el Gobierno debería tomar nota es evitar los enfrentamientos entre los partidarios de la Cristina Kirchner y los opositores, porque esto puede desembocar en situaciones imprevisibles.
Lo que en definitiva quiero decir es que podemos tomar este hecho como un punto de reflexión para tomar conciencia de que estamos mal y de que, si no cambiamos nuestros valores y conductas a futuro, continuaremos en esta espiral de decadencia que ya no se puede soportar más.
Insisto en lo que ya he dicho en alguna nota anterior, debemos ver bien a quién vamos a votar el año que viene, no solo analizar las personas, sino también las ideas que proponen y cómo ha sido su historia política: si ha sido coherente en su pensamiento y en su ideología.
Ahora también debo señalar que el Poder Judicial está cuestionado seriamente, porque fiscales y jueces muchas veces son cuestionados por su parcialidad en algunos de sus alegatos y sentencias, de acuerdo al color político de turno.
Lo grave de todo esto es que nuestros jóvenes más preparados se van del país y ya está pasando que hay empresas que buscan profesionales capacitados en determinadas disciplinas y no los encuentran, porque buscan una calidad de vida mejor en otros países. O sea que estamos invirtiendo en formar profesionales que luego se van al exterior ¿Seguiremos cometiendo estos errores? Así pasaremos a ser un país de viejos en poco tiempo.
No volvamos a revivir la letra del tango Cambalache “Siglo veinte cambalache, problemático y febril, el que no llora no mama y el que no afana es un gil, si es lo mismo el que labura noche y día como un buey, que el que mata, que el que cura o está fuera de la ley”. Como dijo alguna vez Paulo Coelho: “Lo peor de parte de una sociedad manipulada por la clase política es ver a pobres defendiendo a ricos culpables de su pobreza”.
Aldo García López
DNI 4974484