El resultado de esta elección es importante para las aspiraciones futuras tanto de Axel Kicillof como de Horacio Rodríguez Larreta.
PANORAMA PROVINCIAL

Se empieza a descorrer el telón del escenario político

Aquellos detractores de las elecciones Primarias Abiertas y Obligatorias que se celebrarán hoy en la Provincia, sostienen que no definen nada. Que se trata de una gran y costosa encuesta que bien podría soslayarse, para ir directamente a los comicios generales sin pasar por esta estación intermedia.
En términos estrictamente institucionales, hay una parte de verdad que los asiste. Porque en medio de la aparente apatía y malhumor, hoy no se eligen cuántos diputados tendrá cada fuerza, cuál será la futura composición de la Legislatura ni de los concejos deliberantes. Eso quedará para la cita de noviembre. Habrá sí, algunas internas que se dirimirán, la más jugosa es la que afronta Juntos, el principal espacio de oposición, entre Facundo Manes y Diego Santilli.
Pero esa aparente inocuidad de las PASO no es tal. Porque hoy, en función de los resultados que obtengan unos y otros, comenzará la construcción del marco político que podría dominar el escenario de cara a la pelea mayor de 2023.
El Frente de Todos y Axel Kicillof no se juegan poco. El Gobernador tiene para sí el desafío de una elección de medio término en el que se mezclan varias cuestiones. Una de ellas tiene que ver con las aspiraciones reeleccionistas que tímidamente el mandatario comenzó a explicitar en público. Hace algunas horas, por caso, habló de un proyecto a ocho años. Conscientes de un escenario complejo, en la Gobernación se conforman con ganar “por un voto”. 
Existe otra cuestión que está en la mira de Kicillof: la composición del Senado y la “necesidad”, como definen en Casa de Gobierno, de garantizar “gobernabilidad” en los dos últimos años de administración. La composición de la Cámara alta es uno de los karmas políticos del oficialismo, donde Juntos por el Cambio cuenta con una mayoría holgada. El Frente de Todos aspira que en las Primarias de hoy comience a configurarse un escenario en las cuatro secciones electorales en las que se eligen senadores, que le permitan en noviembre terminar con esa hegemonía que tanto le inquieta y que le permitiría, por caso, avanzar sin negociaciones con la designación de jueces y en otros organismos que esperan cubrir vacantes como el Banco Provincia.

Qué busca la oposición
Para la oposición el resultado de hoy anota también impactos fuertes. El desenlace de la interna entre el PRO liderado por Santilli y la UCR capitaneada por Manes excede el mero armado final de la lista de diputados nacionales.
Un triunfo del neurocientífico no solo devolvería al radicalismo a una posición de poder que, por distintas razones, resignó en la Provincia. También, casi en forma automática, sería la plataforma de lanzamiento de una candidatura presidencial de Manes para 2023. Sea cual fuere el resultado en la UCR interpretan que el partido logró una fuerte revitalización.
En territorio ajeno, ese resultado significaría un golpe duro a la aspiración presidencial de Horacio Rodríguez Larreta, a quien le saldría un competidor que hasta hace muy poco tiempo no aparecía en el horizonte. Pero también, un cimbronazo a su idea de que Santilli vaya dentro de dos años a la pelea por la Gobernación. 
El mapa que arrojen las PASO aporta otro dato de interés. Y es el que tiene que ver con la diferencia de votos que quedará reflejada entre el Frente de Todos y la sumatoria de Juntos. Brota del discurso oficial el conformismo con ganar, no importa por qué resultado. Hacia adentro, en cambio, surge una preocupación: que una distancia estrecha deje abierta la chance de que la oposición pueda dar vuelta la tortilla en noviembre.
Ese es el otro aspecto a mirar con lupa: la distancia que quedará entre unos y otros. En definitiva, si el resultado tendrá ribetes de definitivo o si, por el contrario, deja alguna puerta abierta para sorpresas posteriores.