Desde “el candidato es el proyecto”a la mejor “marca es la unidad” para conservar el poder
Quedó atrás el lema que agitaba el kirchnerismo en la elección que llevó a Daniel Scioli como candidato presidencial en 2015. Pero hoy, ante la falta de una figura que rompa el molde en la Provincia, se privilegiará la marca del FdT como mayor atractivo.
“Más que cualquier candidato, lo que mejor mide es la marca del Frente de Todos (FdT). Lo raro es llegar unidos en medio de esta crisis”, se sinceró una fuente de Casa Rosada en medio de la puja interna sobre quién encabezará la boleta bonaerense de candidatos a diputados nacionales. En el oficialismo hay un intento por mostrar unidad pese al pase de facturas que el kirchnerismo le prodigó al Ejecutivo por el decreto que cambió la ley de vacunas -y posibilitó la llegada de 3,5 millones de dosis de la norteamericana Moderna, pero que se materializó por la cerrada defensa que ensayó la Casa Rosada del régimen cubano ante la revuelta popular que ha sacudido a la isla.
Justamente el respaldo oficial al Gobierno cubano sacó del ostracismo a Mauricio Macri, que desde Suiza tuvo que ceder a la estrategia electoral de Horacio Rodríguez Larreta, que impuso como candidatos a María Eugenia Vidal en la capital y a Diego Santilli en la Provincia, que mediante la difusión de un video apoyó a los manifestantes cubanos a defender la libertad y “reclamar el fin de la dictadura” y los instó a luchar para mejorar las “condiciones de su forma de vida”.
Luego otros referentes de la oposición, como el propio alcalde porteño, se sumaron a las consignas de apoyo a los manifestantes que ganaron las calles de ciudades como La Habana o Santa Clara.
Con la baja de la precandidatura de Jorge Macri, ahora Santilli disputará la primaria del 12 de septiembre contra el radical Facundo Manes. El actual vicejefe de Gobierno porteño ya arrancó las recorridas por distritos del noroeste del Gran Buenos Aires y contrató consultoras de comunicación en lo que se prevé una intensa campaña. Otro de los referentes provinciales del armado, el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, aún no decidió con cuál de las dos listas “jugará” en los comicios legislativos pero ve “muy saludable” que haya PASO en “Juntos”.
Dos listas
En la Capital la coalición opositora también tendrá dos listas de precandidatos a diputado nacional con propuestas bien diferenciadas: la que encabezará Vidal con un discurso “antigrieta” y la “libertaria” del economista Ricardo López Murphy, que se rodeó de “famosos” de Twitter que gustan rivalizar por esa red social con el oficialismo, como la científica Santa Pita.
La verdadera batalla electoral, con todo, tendrá lugar en territorio bonaerense. Es en el principal distrito del país donde se trazan estrategias electorales para el Conurbano pero también para el interior provincial. Es en las denominadas “reuniones de los lunes” donde representantes de las tres patas del Frente de Todos, como Axel Kicillof, Sergio Massa, Wado de Pedro, Máximo Kirchner o Santiago Cafiero, avanzan en el análisis político y territorial. “La estrategia no es la misma en el GBA que en el interior”, apuntó una calificada fuente bonaerense consultada que hizo foco en la elección a senadores provinciales que tendrá lugar en municipios de la 1ª, 4ª, 5ª y 7ª secciones electorales y donde, según los pronósticos oficiales, “sumando 3 bancas” el oficialismo podría torcer las actuales mayorías del Senado provincial que, en un futuro, le asegurarían una rápida aprobación de lo que considera leyes fundamentales.
Logística
Mientras, se avanza en la Gobernación en la logística para poder garantizar a la justicia electoral una votación normal con los protocolos preventivos para evitar contagios de coronavirus. Según se pudo averiguar, a fin de evitar aglomeraciones se ampliarán los lugares de votación de unos 4700 a casi 7 mil, incluyendo universidades y clubes, entre otras locaciones que complementarán a las escuelas.
Si en el oficialismo aún no quieren confirmar a los principales candidatos en la Provincia, en la nómina porteña se descuenta que el asesor presidencial Leandro Santoro sería el elegido para ocupar el primer lugar. A los nombres de Victoria Tolosa Paz y a los ministros Gabriel Katopodis (Obras Públicas) y Daniel Arroyo (Desarrollo Social), se le ha sumado el de Cafiero como posibles postulantes a la boleta bonaerense. Pero cerca del Presidente descartan que vaya a “entregar” a su jefe de Gabinete y que en diciembre esa silla sea ocupada por un funcionario de confianza de Cristina Kirchner. “Quedaría muy debilitado”, admite una fuente que transita los pasillos del primer piso de Balcarce 50.
En el kirchnerismo argumentan que el jefe de Gabinete, junto al ministro de Seguridad provincial Sergio Berni, son los dirigentes del Frente de Todos que “más miden” en los últimos sondeos pero que ninguno llega al techo de 42 puntos que hoy ofrece la coalición como el espacio político preferido por los encuestados.
“No hay clima electoral en la calle y al ser una elección legislativa atrapa menos”, opinó un intendente del GBA consultado por este diario que hizo foco en los problemas cotidianos que ocupan a la gente, como la pandemia o el apretón al bolsillo de los consumidores. La inflación decrece poco -el Indec informó un 3,2% de aumento en junio que bajó un 0,1% respecto a mayo-, y el crecimiento de la actividad industrial y de la construcción que informa el organismo estadístico contrasta con un consumo alicaído. “Los comercios siguen mal. Y se vende poco porque la gente no logró recuperar el ingreso”, agregó el jefe comunal que coincidió con otros dirigentes del oficialismo que el mes de agosto, con la campaña electoral a pleno, podría disparar anuncios de aliento al consumo.
Según se pudo averiguar, uno de los planes en los que trabaja en el ministerio de Producción es el lanzamiento de un “Ahora24”, con la posibilidad de pagar en cuotas a bajo interés durante 2 años la compra de bienes. Un funcionario de Casa Rosada reconoció que “la crisis pega más en el último percentil de los asalariados y en los informales. Va a haber anuncios, pero también es difícil llegar ahí”.
Reapertura de Paritarias
Hay concordancia en el oficialismo que hay que dejar atrás el ajuste fiscal que implementó el ministro Martín Guzmán (Economía) durante los primeros meses del año y que camino a las urnas habrá que dar un mayor impulso a la demanda. La reapertura de paritarias, el adelantamiento del pago de las cuotas en las que fue dividido el aumento del 35% del salario mínimo y las revisiones salariales de distintas negociaciones, van en ese sentido.
Guzmán, que no quiere ser conocido como el “ministro de la deuda”, no puede escapar a la principal misión que le encomendó el Presidente. Recién llegado de la cumbre del G20 en Venecia, donde mantuvo una bilateral con la secretaria del Tesoro norteamericana, Janet Yellen, no ha logrado avances sustanciales en el acuerdo con el FMI por la renegociación de la deuda de 44 mil millones de dólares. En el organismo multilateral miran de reojo el devenir de los próximos comicios.
Dentro de la coalición oficial no surgieron grietas en torno al apoyo al Gobierno cubano aquejado desde hace una semana por la protesta callejera de manifestantes que piden mejores condiciones de vida y más apertura política. En Cancillería aceptaron las explicaciones del embajador de ese país en Argentina, Pedro Pablo Prada que coincidieron con lo que le había transmitido a Felipe Solá el embajador Luis Ilarregui, a cargo de la diplomatura argentina en La Habana. Este último dirigente había llegado a su cargo por impulso de Cristina, quien tiene un vínculo afectivo y político con la administración de Miguel Díaz Canel. No olvida que la isla cobijó en 2919 a su hija Florencia cuando desde los tribunales de Comodoro Py avanzaban en causas contra la familia Kirchner, como Hotesur o Los Sauces.
El decreto que posibilitó el ingreso de vacunas estadounidenses al país no sólo dio cuenta de la inconveniencia a nivel sanitario que acarreó la demorada “decisión política” del Ejecutivo. También resultó contradictorio debido a que el acercamiento a Rusia, con la que se terminó pactando la compra de unas 30 millones de dosis de Sputnik V, terminará costando a las arcas públicas casi 290 millones de dólares y, en cambio, la administración de Joe Biden donó las 3,5 millones de aplicaciones de Moderna, en el marco de la cesión de varios lotes a distintos países de la región. Una medida que no deja de tener una lectura geopolítica por el persistente avance en Latinoamérica de la patria de Vladimir Putin y de la otra potencia asiática, China.