Alberto Fernández impulsa un acuerdo que seduce a las pymes, el sector más postergado por la política económica, ya que incluiría desdolarizar tarifas de energía y bajar tasas de interés.
LA COLUMNA DE LA SEMANA

Postergar la deuda y sellar un pacto social, las claves del plan de Alberto

Alberto Fernández envió señales claras al mercado sobre la propuesta de renegociación de deuda "sin quita" que espera encarar en su probable gobierno, mientras que ya inició gestiones ante empresarios y sindicalistas con el fin de impulsar un gran acuerdo social destinado a frenar la inflación y reanimar el empleo.
Resignados a que deberán renegociar los plazos de pago, los tenedores de bonos intentan ser seducidos por el candidato del Frente de Todos con el hecho de que la propuesta no incluirá quitas. Es la llave para lograr aplazar los vencimientos de deuda ante un escenario de cesación de pagos que ya se empezó a comprobar.
En paralelo, Fernández apelará al consenso entre sectores empresariales y sindicales para acordar una tregua en la disputa entre salarios y precios. Ya se mostró junto a sindicalistas de la CGT y referentes de la UIA, y cuenta con el respaldo de gobernadores para encarar esa propuesta.
El acuerdo que impulsa seduce a las pymes, el sector más postergado por la política económica, ya que incluiría desdolarizar tarifas de energía y bajar tasas de interés. Ya trabajan en esa iniciativa los economistas Matías Kulfas y Cecilia Todesca.
Mientras tanto, Guillermo Nielsen prepara el plan para evitar un default total, Martín Redrado atiende uno de los frentes más complicados: cómo bajar las tasas que paga el Banco Central para renovar las Leliq. Emmanuel Alvarez Agis, ex número dos de Axel Kicillof, ya se puso a disposición de Alberto Fernández y sería tenido en cuenta en un futuro equipo económico.
 Ayudaría a un eventual nuevo Gobierno del Frente de Todos el hecho de que cesaría el distanciamiento entre la CGT y los Moyano, que trabajarían a favor de la unidad sindical y para dar su respaldo al nuevo gobierno en los primeros meses.

El mercado interno
En sus primeros 100 días de Gobierno, Alberto Fernández impulsaría un acuerdo económico y social para bajar la inflación, recuperar la productividad y mejorar el salario real. La propuesta incluiría una reforma laboral sector por sector destinada a adaptar las modalidades de trabajo a las nuevas necesidades del mercado.
La propuesta para el desarrollo industrial y tecnológico sería impulsada a través de asistencia financiera.
Un eventual gobierno de Alberto Fernández también buscará potenciar con más fuerza el megayacimiento no convencional de petróleo y gas en Vaca Muerta.
Según los técnicos del Frente de Todos, Vaca Muerta permitirá crear 500.000 puestos de trabajo en poco tiempo y subir las exportaciones un 50%, como ya está ocurriendo en el caso del gas.
Del sector energético provendrán parte de las divisas necesarias para mantener a raya al dólar y alcanzar el superávit comercial.
Lograr los superávits gemelos, como en la época de Néstor Kirchner, es un punto central de la estrategia que imagina Alberto Fernández. Sostener un superávit fiscal primario será otro de los objetivos centrales, como señal a los inversores y a los acreedores.
Estos bosquejos de plan se inscriben en los que el candidato del Frente de Todos prometió para la deuda: encarar una negociación "seria, sensata y sin quita", lo cual fue bien recibido por el mercado.
Fernández dice pretender una renegociación de deuda a la uruguaya, prolongando los plazos de vencimiento de los bonos, pero sin quita de capital ni de intereses. "Nunca hablamos de dejar de pagar la deuda", machaca en sus discursos Alberto Fernández, ante tenedores de bonos cada vez más nerviosos por las turbulencias políticas en la Argentina.
Deberá renegociar rápido el acuerdo con el FMI como señal hacia los mercados, contar con unos US$ 11.000 millones pendientes de desembolso por parte del organismo.

Macri intenta una remontada
El presidente Mauricio Macri hará un intento en lo que queda hasta las elecciones de octubre por alcanzar una remontada épica que lo ubique en el balotaje, lo cual parece casi imposible. Para ello, decidió cambiar la estrategia de contacto con la calle, con una recorrida por 30 ciudades clave y un primer acto en las Barrancas de Belgrano.
Macri busca transmitir que la Argentina iba camino a iniciar un proceso de recuperación hasta que su Gobierno chocó con la derrota en las elecciones primarias. Su problema es que la economía no lo acompaña y la pobreza en niveles récords constituye un duro revés para sus promesas de campaña.