CONTROL DE LA INFLACIÓN
El Gobierno avanza con la SuperCard
Intensas negociaciones oficiales con las empresas del sector financiero para la implementación técnica de la tarjeta que se usará en supermercados.
El Gobierno nacional avanzó en las últimas horas en negociaciones con empresas del sector financiero para la implementación de aspectos técnicos de la tarjeta SuperCard, que las grandes cadenas de supermercados promoverán como una forma de reducir los costos financieros en créditos para el consumo.
Según confirmaron fuentes oficiales, desde la Secretaría de Comercio Interior, que encabeza Guillermo Moreno, están avanzadas las negociaciones con las administradoras como First Data, una empresa que presta servicios para MasterCard, Diners Club, Nativa y plásticos de la compañía Cencosud, entre otras.
Las empresas administradoras proveen software y servicios que permiten operaciones como pagos en cuotas, brindar reportes de información financiera a los comercios, acceder a liquidaciones online, entre otros.
También trascendió que el Gobierno pretende que no sólo las empresas del sector supermercadista administren la nueva tarjeta sino que también el Banco Hipotecario -en el que el Estado es accionista- onde las operaciones.
En tanto, el titular de la Dirección de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial de Entre Ríos, Juan Carlos Albornoz, dijo que aún no se fijó fecha para la puesta en marcha de la tarjeta SuperCard en todo el país.
“La idea es que empiece a funcionar lo antes posible, pero todavía no hay una fecha precisa”, señaló el funcionario provincial en declaraciones periodísticas. En ese contexto, desde el Gobierno también dejaron trascender que se analizan medidas para beneficiar a los comercios más chicos que vendan productos de primera necesidad, aunque por el momento no hay precisiones al respecto.
Según se anunció, la SuperCard se implementará en las grandes cadenas de supermercados y convivirá con las otras tarjetas de crédito. El plástico que se lanzaría en las próximas semanas reduce las comisiones que en la actualidad los bancos cobran a los supermercados de hasta el 3 por ciento.
Además se prevé que bajen los costos de financiamiento para los consumidores. La medida apunta a otorgar un margen de rentabilidad a las empresas supermercadistas mientras mantienen un congelamiento de precios acordado con el Gobierno nacional desde el 1 de febrero pasado.
Según confirmaron fuentes oficiales, desde la Secretaría de Comercio Interior, que encabeza Guillermo Moreno, están avanzadas las negociaciones con las administradoras como First Data, una empresa que presta servicios para MasterCard, Diners Club, Nativa y plásticos de la compañía Cencosud, entre otras.
Las empresas administradoras proveen software y servicios que permiten operaciones como pagos en cuotas, brindar reportes de información financiera a los comercios, acceder a liquidaciones online, entre otros.
También trascendió que el Gobierno pretende que no sólo las empresas del sector supermercadista administren la nueva tarjeta sino que también el Banco Hipotecario -en el que el Estado es accionista- onde las operaciones.
En tanto, el titular de la Dirección de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial de Entre Ríos, Juan Carlos Albornoz, dijo que aún no se fijó fecha para la puesta en marcha de la tarjeta SuperCard en todo el país.
“La idea es que empiece a funcionar lo antes posible, pero todavía no hay una fecha precisa”, señaló el funcionario provincial en declaraciones periodísticas. En ese contexto, desde el Gobierno también dejaron trascender que se analizan medidas para beneficiar a los comercios más chicos que vendan productos de primera necesidad, aunque por el momento no hay precisiones al respecto.
Según se anunció, la SuperCard se implementará en las grandes cadenas de supermercados y convivirá con las otras tarjetas de crédito. El plástico que se lanzaría en las próximas semanas reduce las comisiones que en la actualidad los bancos cobran a los supermercados de hasta el 3 por ciento.
Además se prevé que bajen los costos de financiamiento para los consumidores. La medida apunta a otorgar un margen de rentabilidad a las empresas supermercadistas mientras mantienen un congelamiento de precios acordado con el Gobierno nacional desde el 1 de febrero pasado.