“Llegar a un acuerdo que respete el poder territorial de cada uno”, es el pensamiento que dejan trascender varios jefes comunales del peronismo que actualmente son intendentes de varias de las ciudades de padrones más numerosos, que incitan al Gobernador a desdoblar las elecciones si no se diera por sentado su predominio electoral. No quieren romper pero están seguros que es el momento para avanzar e impedir que La Cámpora “vuelva a tener la lapicera”.
Están seguros de que si hubiera una PASO la ganarían y, en todo caso, en una interna también.
Para ellos es evidente la debilidad de la ex presidenta, demostrada en la votación que terminó con la media sanción en diputados del proyecto para suspender las Primarias.
A partir de ello, ven el camino abierto para desdoblar las elecciones en la Provincia de Buenos Aires, a lo que se opone Cristina.
Sólo los legisladores que militan en La Cámpora, cumplieron a rajatabla la orden de la ex presidenta de rechazar la suspensión de las PASO, el resto orbitó entre la ausencia o la abstención, y hasta votarán en contra de los designios de la líder.
Hubo, entre estos últimos, varios diputados que se descontaba acompañarían a la ex presidenta como los de Santiago del Estero, la primera provincia que visitó Cristina cuando asumió la jefatura del PJ.
Se llegó al extremo que el presidente del bloque de diputados, Gerardo Martínez, que hasta ahora era considerado un incondicional, se abstuvo.
En la práctica apoyan la iniciativa del Gobierno de suspender las PASO, lo que deja abierto el camino en forma absoluta para el adelantamiento de las elecciones provinciales.
La restitución del fondo de fortalecimiento fiscal
Más aún, muchos de ellos firmaron un proyecto para reclamarle al presidente Javier Milei, que le restituya a la provincia de Buenos Aires, el fondo de fortalecimiento fiscal, para reforzar la seguridad bonaerense.
El reclamo es de unos $700 mil millones de pesos, y unifica a todo el peronismo para el que Buenos Aires es un verdadero bastión, como quedó certificado en la elección de Kicillof como mandatario bonaerense.
El Gobernador naturalmente que desea formar un bloque de legisladores provinciales, lo que le fue negado cuando “la lapicera” la tuvo Máximo Kirchner, y lo apoyan en el desafío porque no quieren perder terreno en sus municipios y que los candidatos sean impuestos por La Cámpora.
En esa situación, Sergio Massa trata de asumir el papel de mediador y si logra que eventualmente los barones del Conurbano lleguen a un acuerdo, él podría ser el primer candidato a diputado nacional.
La fórmula se basaría en que las elecciones de intendente se hagan el 9 de noviembre, después de la nacional, para que los barones del Conurbano demuestren previamente el apoyo a la lista de disputados nacionales, que también podría ser encabezada por Cristina.
Desde La Cámpora, advierten que desdoblar las elecciones y provincializar los comicios puede ser riesgoso para Kicillof porque el tema de la inseguridad sería más explotado aún que en estos días.
Alternativas
Todos creen que Máximo quiere ir a la interna, o poner todos los cañones contra Kicillof y los intendentes que rodean al Gobernador.
El diálogo parece roto, pero es muy posible que Cristina y Axel terminen coincidiendo en no fomentar divisiones frente al enemigo en común porque no dejan de advertir el crecimiento de los libertarios, como continuamente afirma el Gobernador.
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