La Cámara de Diputados dio el primer paso para que Axel Kicillof tenga su RIGI bonaerense. Ayer, con el voto de 37 legisladores del oficialismo, se aprobó el proyecto que impulsó el Ejecutivo provincial luego de la intensa polémica que se generó por el rechazo del mandatario a adherir al régimen de incentivo a las inversiones promovido a nivel nacional por el presidente Javier Milei.
El proyecto fue rechazado por la oposición. Las bancadas de UCR + Cambio Federal, Acuerdo Cívico UCR-GEN, la Coalición Cívica y el bloque de Unión Renovación y Fe, se abstuvieron de votar. En tanto, el PRO, el PRO Libertad, La Libertad Avanza y los dos diputados de Izquierda, directamente votaron en contra de la iniciativa.
El RIGI bonaerense propone tres grupos de beneficiarios de acuerdo al monto de la inversión, que gozarán de exenciones parciales sobre los impuestos a los Ingresos Brutos, Inmobiliario y Sellos. El primero, con un monto de inversión de hasta USD 50 millones, con exenciones del 30% por 5 años; el segundo con desembolsos de entre USD 50 y 200 millones con reducciones del 25% por 4 años; y el tercero con inversiones mayores a USD 200 millones, con beneficios del 20% por 3 años.
“La decisión política de impulsar el RIGI bonaerense resulta una necesidad, un deber y una responsabilidad”, consideró el diputado oficialista Gustavo Pulti. En tanto, desde distintos sectores de la oposición salieron con los tapones de punta contra el proyecto de Kicillof.
“El Régimen de Fomento para Inversiones Estratégicas en la Provincia es un proyecto que responde a un capricho ideológico del gobernador Axel Kicillof”, sostuvieron legisladores del PRO. “Advertimos que este proyecto deja en manos del Poder Ejecutivo la discreción total para decidir qué inversiones serán beneficiadas y bajo qué condiciones. En lugar de incentivar, castiga a quienes más invierten”, añadieron.
“El RIGI de Kicillof es todo lo contrario al nacional y un capricho ideológico que espanta inversiones”, dijo el diputado Agustín Forchieri. Para el jefe del bloque del PRO, Agustín Forchieri, el proyecto del Ejecutivo “llega tarde y es la antítesis del RIGI que presentó el Gobierno nacional y aprobó el Congreso”.
“No es la ley que la Provincia necesita porque es arbitraria y le da todo el poder al gobernador para elegir qué inversiones avanzan y cuáles no. También, es una mala versión de la ley nacional”, agregó. En tanto, otro diputado del PRO Matías Ranzini, “el RIGI de Kicillof es lo mismo que las SIRA del kirchnerismo porque fomenta la discrecionalidad y deja en manos del gobernador la decisión de qué inversiones avanzan y cuáles no”.
Por otra parte, cuestionó que el kirchnerismo propuso “votar a libro cerrado”, sin que el proyecto se pueda discutir en comisiones. La referencia tiene que ver con que sectores de la oposición propusieron modificaciones que fueron rechazadas por Unión por la Patria.
Por otra parte, el diputado de izquierda, Guillermo Kane, señaló que este régimen, que otorga exenciones fiscales multimillonarias a las grandes empresas, desfinancia los servicios públicos esenciales como salud y educación. “Kicillof presenta un ‘Estado presente’, pero lo que realmente hace es saquear los presupuestos de hospitales y escuelas para beneficiar a los capitalistas”, afirmó.
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