CÁMARA DE DIPUTADOS

El bloque radical se divide frente al veto de la reforma previsional

El bloque de diputados de la UCR vuelve a perder la cohesión frente a la decisión de insistir, o no, con la ley que buscó recomponer los haberes jubilatorios, vetada por Javier Milei la semana pasada. A pesar de que fue uno de los primeros proyectos que unió al radicalismo, impulsor de la iniciativa, en este nuevo round parlamentario la incomodidad se apoderó de la bancada, cruzada por afinidades con la Casa Rosada, intereses regionales y especulaciones políticas personales.

Los 34 diputados que componen el bloque liderado por el cordobés Rodrigo de Loredo discuten puertas adentro qué hacer en la sesión especial convocada para el miércoles, a las 11, donde una porción de radicales, junto a Encuentro Federal y la Coalición cívica, intentarán salvar la ley que propone una mejora en los haberes jubilatorios e incluye una nueva fórmula de movilidad. 

Hay al menos siete referentes de la UCR que podrían no acompañar la intención de sus colegas a pesar de haber votado a favor del proyecto en junio de acuerdo al informe que publicó La Nación.

Uno de los primeros en sincerar su posición de no insistir con la ley jubilatoria tal cual se sancionó fue el tucumano Mariano Campero. En la misma sintonía se expresó la cordobesa Soledad Carrizo, la diputada santacruceña Roxana Reyes y el cordobés Luis Picat.

Se podrían plegar a la intención del Poder Ejecutivo los legisladores que responden a los gobernadores radicales Gustavo Valdés (Corrientes) y Alfredo Cornejo (Mendoza), de buen vínculo con la Casa Rosada.

Los nueve integrantes de Innovación Federal, que responden a los oficialismos de Neuquén, Misiones, Salta y Río Negro, también serán determinantes en esta pulseada.