Una postal de la violenta jornada del miércoles frente al congreso.
Una postal de la violenta jornada del miércoles frente al congreso.
EL FISCAL STORNELLI RECLAMÓ QUE LOS ACUSADOS SIGAN EN PRISIÓN

Piden preventiva para los detenidos por destrozos frente al Congreso

El Gobierno le apunta por los incidentes al kirchnerismo y la izquierda y pide que la causa sea caratulada bajo la figura de “sedición”.

El Gobierno sostiene que el kirchnerismo y la izquierda “estuvieron detrás” de los violentos incidentes que se produjeron el miércoles en inmediaciones del Congreso, mientras se debatía la Ley Bases. Así lo advirtió ayer la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien anticipó que denunciará “por sedición” a los manifestantes, a los que acusó de haber intentado perpetrar un “golpe de Estado moderno”. En paralelo, el fiscal Carlos Stornelli, a cargo de la investigación, pidió prisión preventiva para los más de 30 detenidos por los destrozos, a los que le apunta por atentar contra los poderes públicos y el orden constitucional, incitación a la violencia colectiva, intimidación pública y perturbación del orden en sesiones parlamentarias, entre otros delitos. 

“Los responsables de lo que pasó ayer (por el miércoles) son el kirchnerismo y los movimientos de izquierda”, insistió Bullrich y, si bien advirtió que “los convocantes de la marcha fueron los sindicatos”, agradeció “que se fueron temprano, cuando comenzaron los incidentes”. 

En línea con lo que antes había dicho el presidente, Javier Milei, la funcionaria habló de “golpe de Estado. ¿Cómo son los golpes de estado modernos? Es el desgaste permanente para tratar de generar una situación para que el Estado pierda la capacidad de acción”, subrayó y aseguró que en la cartera que comanda ya tienen identificados como partícipes de los hechos de violencia a militantes del MTE, del movimientos Somos Barrios de Pie, al MST, “a grupos kirchneristas y también empleados municipales del gran Buenos Aires”. Además, hay detenidos que responden a otros grupos de izquierda, como el Polo Obrero, el Nuevo MAS y el MEP, aunque en la Casa Rosada le apuntan, sobre todo, a organizaciones ligadas al kirchnerismo. 

Bullrich, que felicitó a las fuerzas de seguridad que reprimieron a los manifestantes por su accionar, recordó además que ya tramita una causa judicial, que llevan adelante la jueza María Servini y el fiscal Stornelli. A la par, el legislador porteño de Republicanos Unidos, Yamil Santoro y los abogados José Magioncalda y Juan Martín Fazio denunciaron por “terrorismo” a las personas que provocaron los desmanes. 
Stornelli, se dijo, pidió la prisión preventiva de los detenidos y ordenó “la obtención y el análisis de las filmaciones de seguridad y otras que hayan captado lo sucedido, el análisis del contenido de teléfonos celulares y otros dispositivos que se hubieran incautado”.

Al respecto, Bullrich, abundó: “Vamos a pedirle a la Justicia que sea carátula de sedición. El Presidente habló de golpe de Estado, que es la lógica del desgaste de la gobernabilidad. Yo desgasto, yo no dejo que funcione un gobierno y con eso lo volteo. Ese es el concepto del golpe de Estado y por eso vamos a ponerle la figura de sedición”. 

En el Gobierno niegan además que los incidentes hayan sido provocados por “infiltrados” del propio oficialismo, tal como denunciaron en la oposición: “Ya van a ver cuando salgan los antecedentes de estas personas, los van a conocer a todos”, dijo ayer Bullrich. 

En la Rosada buscarán identificar a cada uno de los acusados y su filiación política, aunque admiten que entre los detenidos hay personas en situación de calle, en principio sin vinculación con movimientos sociales. Este sería el caso, por ejemplo, de Cristian Valiente, el hombre de 41 años que fue detenido con una granada en la esquina de Avenida de Mayo y Santiago del Estero y que, según trascendió, acumula antecedentes penales por robo, suministro de estupefacientes y violación de domicilio. 

También se dieron a conocer los nombres de los dos jóvenes que incendiaron un auto de la emisora cordobesa Cadena 3. Fueron identificados como Lucas Bálsamo y Dylan Gómez, de 23 y 24 años, ambos oriundos de La Matanza. 

 

”Van a tener que pagar” 

Además de rendirle cuentas a la Justicia, los detenidos tendrán que costear los daños que provocaron. Así lo advirtió ayer el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien calculó que “entre reparaciones y limpieza” la ciudad de Buenos Aires deberá desembolsar unos $278 millones. 

En su cuenta de X (ex Twitter), Macri mostró en imágenes los destrozos que dejó la manifestación con la que sindicatos, agrupaciones del kirchnerismo y la izquierda rechazaron la Ley Bases. “Veredas rotas, cordones, contenedores incendiados, tachos de basura, luminarias, bicicletas, bancos de plazas rotos, grafitis”, enumeró el mandatario porteño el día después de la jornada en la que militantes y policías chocaron en las calles con fiereza, mientras adentro del Senado se debatía el proyecto que, de manera milimétrica, consiguió aprobar la Libertad Avanza. “No me vengan a decir que lo de ayer fue una manifestación pacífica, lo único que hicieron fue romper y violentar lo que nos pertenece a todos. ¿Por qué los porteños tendríamos que pagar el costo de esto? En nuestra gestión, el que rompe, también paga”, sentenció Macri e insistió: “Son delincuentes, hicieron un desastre, van a tener que pagarlo”. 

Del costo total de $278 millones, según relevó el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño, $92 millones corresponden al operativo de limpieza y reposición de materiales vandalizados; y $186 millones serán para la reparación y recuperación de la Plaza de los Dos Congresos y zonas aledañas. 

En el relevamiento se constataron 1700 metros cuadrados de césped irrecuperable por quemaduras y casi 3.000 más que se pueden reparar; 200 plantas ornamentales vandalizadas; tres bancos patrimoniales y ocho cestos destruidos. Además, los daños en luminarias significarán unos $3,7 millones en reparación y las tareas de limpieza, que empezaron ayer bien temprano, demandarán otros $62 millones.

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