Alberto Fernández no descarta su posible candidatura y suma incertidumbre en las filas del oficialismo.
Alberto Fernández no descarta su posible candidatura y suma incertidumbre en las filas del oficialismo.
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

Efectos inocultables de la crisis: el hartazgo social y el fantasma del “que se vayan todos”

Sin posibilidad de recomponer ingresos por el flagelo inflacionario, el oficialismo tampoco logra contener la inseguridad en el Gran Buenos Aires. En JxC buscan blindar la “unidad” y evitar más quiebres en las provincias.

“No es solo la interna sino la indefinición de una propuesta electoral lo que altera los ánimos de los compañeros, de abajo hacia arriba, y ya ni Cristina se salva de las críticas”, reconoció un secretario de Estado segundos después de tensar el rostro ante el ruido de una movilización que atravesaba la Diagonal Norte porteña y pareció encender en él la misma alerta que provocó en toda la clase política la golpiza que colectiveros le propinaron a Sergio Berni, en La Matanza. Por unos minutos asomó el temido “que se vayan todos”.

El hartazgo social por la inseguridad que visibilizó el asesinato del colectivero Pedro Barrientos fue la consecuencia lógica de un contexto lesivo para el electorado del Frente de Todos: el auge del delito en las barriadas del Conurbano y la inflación. 

La Vicepresidenta había incluido a la inseguridad en su discurso del 17 de noviembre en el Estadio Único, más por necesidad que por convicción: ante un escenario económico que ya se avizoraba esquivo en la previa a la votación, optó por inmiscuirse en un tema que siempre fue resbaladizo para la liturgia kirchnerista. Pero la propia interna del FdT paraliza una respuesta efectiva al problema: los cruces entre Nación y Provincia por el envío de fuerzas federales al Gran Buenos Aires se combinan con el recelo de los intendentes por la falta de apoyo del Ejecutivo provincial a su pedido de implementar la Policía local en sus distritos que, de todas maneras, nunca fueron eficaces.

La apuesta por una “síntesis”

La coalición oficialista hoy pareciera encaminarse a definir sus diferencias en una primaria presidencial. Pero hay dirigentes, como el ministro Gabriel Katopodis (Obras Públicas), que apuestan a sintetizar la propuesta electoral en una sola candidatura. Una interna podría dejar demasiados “heridos” o bien obligar a alguno de los presidenciables a caer en el “efecto Angeloz” (el candidato de la UCR en 1989), esto es, cuestionar al presidente en ejercicio para obtener alguna ventaja en los comicios.

Sin posibilidades de ir por su reelección, sobre Alberto Fernández posa la versión sobre la cual en privado apuesta a diagramar una alquimia electoral que termine “con 20 años de kirchnerismo”, es decir, posicionar con éxito a un dirigente del peronismo no kirchnerista para el próximo 13 de agosto.

Algunos dirigentes se aferran a que el domingo 14 de mayo salga fortalecido algún gobernador cuando se renueven autoridades en cinco provincias y ello lo anime a saltar a la pelea nacional. Pero son los menos. La CGT acaba de anunciar que el 1º de Mayo saldrá a confrontar con el Gobierno por la alta inflación: prima el malestar por la falta de espacios para la discusión electoral y por eso más de un jefe gremial ya se piensa como “opositor” en el 2024 ante la eventualidad de un triunfo de JxC.

Si bien en el entorno de la expresidenta están esperando de ella una “jugada electoral” que saque del letargo al oficialismo, este espacio se encuentra en una encerrona. No puede salir a cuestionar a un Sergio Massa, a quien La Cámpora acusa de entregar prebendas al campo y haber atado su suerte al cumplimiento del acuerdo con el FMI, pero tampoco ofrecer medidas que den sustento al relato de la “Década Ganada” ¿Cómo prometer una mejor calidad de vida si la pobreza y la exclusión van en un sendero de crecimiento?

Radicalización

Está claro que ante la falta de una propuesta “esperanzadora” a una sociedad decepcionada por la clase política general, el oficialismo apostará a radicalizar la confrontación contra JxC. El problema es que, esta vez, se le hará difícil contrastar los “dos modelos” en pugna: Mauricio Macri estará ausente de la contienda electoral.

El espejo con el escenario electoral de 2019 resulta bastante cínico: quizás obligue a los candidatos de la coalición oficialista a emular aquel gesto de Macri cuando, en un intento desesperado por reivindicar la obra pública ante el achicamiento del salario real, se agachó ante el flamante Paseo del Bajo y dijo “¡Este cemento es real!”.

Sin embargo, el expresidente sigue tallando en el armado opositor. Hace una semana reunió en sus oficinas de Olivos a Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal y Patricia Bullrich para coordinar la agenda “económica”, pero también para decidir la intervención del PRO de Mendoza ante el desafío del diputado Omar de Marchi al radical Alfredo Cornejo de postularse por afuera de JxC en las elecciones distritales.

El exmandatario, sin embargo, aún no logró torcer la muñeca del alcalde porteño para evitar que éste autorice las elecciones concurrentes a jefe de Gobierno porteño, con la instalación de dos urnas, como forma de hacer lugar al reclamo del radical Martín Lousteau que no quiere verse afectado por un eventual efecto arrastre de la boleta presidencial del PRO. Está en juego, para Rodríguez Larreta, mucho más que las candidaturas a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, porque acordar con el radicalismo era la demostración de que él podría presidir sobre una coalición que ampliara la base política y social del PRO.

El radicalismo sigue firme en su decisión de competir a nivel nacional con dos postulantes, Gerardo Morales y Facundo Manes. El problema está en que el reloj sigue girando y aún no definió cómo hará para seleccionar a un candidato competitivo para las elecciones primarias. Nadie concibe una PASO de cuatro presidenciables en la coalición opositora.

La semana pasada se suspendió una nueva jornada de la Mesa Nacional de JxC por una dolencia del gobernador jujeño pero la misma podría ser reprogramada para los próximos días. En el armado opositor consideran necesario el encuentro para reafirmar la necesidad de dar un mensaje de unidad que le permita sortear los roces por las rupturas acaecidas a nivel provincial: el próximo domingo habrá elecciones a gobernador en Río Negro y Neuquén, dos distritos donde no hubo acuerdo para ir con una sola lista a dichos comicios.

El otro objetivo de los referentes opositores es redactar un diagnóstico unívoco sobre el complejo estado de la economía. En junio presentarán la plataforma electoral sobre este y otros temas, pero saben que las reformas que deberían implementar en caso de volver a ser gobierno requerirán el mayor consenso posible y una sociedad informada sobre la compleja coyuntura.

Massa viaja a Washington para participar en Asamblea del FMI y BM y encuentro del G20

El ministro de Economía, Sergio Massa, viajará a Washington, donde se volverá a reunir con la titular del FMI, Kristalina Georgieva, y asistirá a la cumbre de ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales del G20, dentro de las reuniones de primavera (boreal) del FMI y el Banco Mundial.

El funcionario argentino aprovechará este foro para mantener también reuniones bilaterales y con directivos de los organismos, dentro del programa que la Argentina mantiene con el FMI y ante la necesidad de fomentar el comercio exterior y captar más reservas.

Massa viajará acompañado por el jefe de asesores del Ministerio, Leonardo Madcur; el asesor en Relaciones Internacionales, Gustavo Martínez Pandiani; y el director de Comunicaciones de la cartera económica, Santiago García Vázquez.

El ministro tiene pautado llegar a la capital de Estados Unidos el miércoles 12 para asistir el jueves 13 a un desayuno en el cuartel general del FMI, donde se verá con sus pares de la región y asistirá a la cumbre de ministros de Finanzas del G20.

Asimismo, tiene previsto reunirse en una bilateral con el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann, la la vez que participaría de un almuerzo en donde el tema central sería el aumento en la eficacia para la recaudación de impuestos.

Massa mantendrá también reunión bilateral con la segunda del FMI, Gita Gopinath, tras la aprobación de la semana pasada de la cuarta revisión del programa de la Argentina con el organismo, que permitió el desembolso de US$ 5.400 millones, y de cara al inicio de la próxima revisión de los números de primer trimestre del 2023.

Con Georgieva se verá cara a cara, en el marco de una reunión de ministros de la región y el resto del hemisferio (Canadá y Estados Unidos).

Asimismo, se reunirá con la subsecretaria de Estado de los Estados Unidos, Wendy Sherman; el subsecretario adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Ricardo Zúñiga; y el director adjunto del Consejo Nacional de Seguridad, Michel Pyle.

También mantendrá un encuentro de Gobernadores del FMI, donde participará de una sesión de Evaluación alerta temprana (EWE) que, junto con el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB), que evalúa semestralmente "los riesgos de cola" para la economía mundial.

COMENTARIOS