En lo que es un hecho inédito, tres entidades que compiten por las pymes se reunieron ayer en la sede de Came. Todo un símbolo de que la crisis ya no deja lugar a las diferencias entre entidades empresarias y las empuja a unirse en los reclamos.
Por iniciativa de Alfredo González, el titular de Came hubo un diálogo público con Daniel Funes de Rioja (foto), presidente de la UIA y su par Mario Grinman de la Cámara de Comercio ante el consejo directivo de Came con dirigentes llegados de las provincias que enumeraban sus pesares por los impuestos y los juicios laborales “que funden a las pymes”.
Cuando se le preguntó a Grinman qué lo separaba de Came, soltó: “No hay nada que nos separe, era un tema de la dirigencia de estas entidades”. Lo cierto es que hubo un discurso común en focalizar a la inflación como el principal problema, en solicitar responsabilidad y estabilidad económica al Gobierno.
Las tres cámaras tienen distintos intereses por los tamaños de las empresas que las conforman, a pesar de tratarse de pymes. En la Cámara de Comercio predominan las cadenas de supermercados mientras que en la Came, los comercios. En la UIA hay más medianas que pequeñas. Y sin embargo tienen la misma preocupación por lo que llaman “adecuación laboral”, un mayor apoyo del sistema bancario, y cambios en el sistema tributario. Esta vez no hubo quejas por el acceso a los dólares a precio oficial para los productos importados.
Tampoco por los precios justos. Y la mayor coincidencia fue el pedido de diálogo entre los sectores para salir de la crisis. “Nadie puede resolverlo solo”, sintetizó Funes de Rioja.
Hablaron de la buena relación con la CGT y especialmente con el sindicato de Comercio, al punto que mencionaron que era un privilegio un sindicalista como Armando Cavalieri. Eso sí, no lo invitaron a la reunión porque justo están, tanto la Came como la Cámara de Comercio en plena negociación paritaria.
González, con partida de nacimiento en el Chaco, busca darle continuidad a lo que acaba de comenzar. Cuenta que tuvo una infancia y una juventud de puro sacrificio. Es el propietario de Centroficina, dedicada a la fabricación de muebles y equipamiento para oficinas y el hogar ubicado en el parque industrial de Puerto Tirol de esa provincia. Es directivo de la Bolsa de Comercio de Chaco y ganadero.
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