Un comerciante de 61 años fue asesinado ayer de al menos un balazo cuando presuntamente se tiroteó con cuatro delincuentes que lo abordaron con aparentes fines de robo cuando llegaba a su fábrica de productos de algodón, en la localidad bonaerense de Caseros, partido de Tres de Febrero, informaron fuentes judiciales y policiales.
El hecho ocurrió pasada la medianoche en una fábrica ubicada en la calle Pini 4554 de la mencionada localidad del noroeste del conurbano, donde personal de la comisaría 1a de Caseros arribó tras un llamado al 911 de vecinos que reportaban la presencia de una persona herida tras haberse escuchado una serie de disparos.
Dentro de la fábrica, que se dedica a la producción de artículos de algodón, se encontraba su dueño Rolando Omar Villafañe (61) con un sangrado en la zona abdominal producto de una herida de bala, tendido al lado de su camioneta Ford Ranger.
El yerno del comerciante decidió trasladar a Villafañe en su propio vehículo a la clínica Trinidad de Ramos Mejía, donde pese a los intentos por reanimarlo, falleció tras un paro cardiorrespiratorio, producto de la gravedad de la herida, explicaron las fuentes.
El hombre luego le contó a la Policía que su suegro estaba solo al momento del hecho y que lo llamó por teléfono para pedirle ayuda porque le habían disparado.
El caso comenzó a ser investigado por la fiscal Gabriela Disnan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de San Martín, quien se hizo presente en la fábrica para dirigir la investigación y ordenar las primeras medidas.
Si bien en un principio se barajaban distintas hipótesis, la observación que la fiscal y la Policía hicieron de una serie de videos de las cámaras de seguridad de la misma fábrica hacen presuponer que se trató de un intento de robo, que fue resistido por el propio Villafañe.
Dentro de la camioneta de la víctima se secuestró una pistola calibre 9 milímetros marca Browning que se cree fue disparada por el comerciante.
El arma, que tiene la inscripción “Policía de la Provincia de Buenos Aires”, estaba montada, había 11 balas en el cargador y cinco vainas servidas en la escena.
Según voceros judiciales consultados, en lo videos se observa cómo Villafañe llega en su camioneta a la fábrica, activa la apertura del portón para ingresar y en ese momento lo observan de un automóvil Peugeot 208 negro que pasa por el lugar, pero al cabo de unos segundos regresa.
En la secuencia siguiente se ve que del auto bajan cuatro delincuentes, algunos armados, se meten en la fábrica y luego salen corriendo, uno de ellos efectuando disparos hacia el interior de la fábrica, para huir en el mismo Peugeot 208 en el que había llegado.
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