Justo una semana antes de que finalice su mandato al frente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el ministro Carlos Rosenkrantz llamó a una audiencia para elegir hoy a quien lo sucederá en el cargo. El ciclo de Rosenkrantz al frente del máximo tribunal tiene fecha de vencimiento el próximo 30 de septiembre y habría un principio de acuerdo sobre el nombre de quien será, a partir de octubre, el nuevo presidente.
El texto de la acordada -que se mantiene en un estricto secreto- indicaría que el nuevo Presidente de la Corte Suprema de Justicia será Horacio Rosatti.
Para llegar a esta elección, el voto decisivo sería el del cordobés Juan Carlos Maqueda, y el ex ministro de Néstor Kirchner contaría también con el aval de Rosenkrantz, quien quedaría como vice del alto tribunal.
El secretario de uno de los jueces había adelantado que la elección de las nuevas autoridades se había preparado como una sorpresa que se iba a conocer el pasado martes 14, después de las PASO; sin embargo, la novedad se postergó -primero- para el martes próximo y -luego- se adelantó para hoy. Se trata de un acuerdo extraordinario se realizará por Zoom a partir del mediodía. El llamado se concretó sorpresivamente después del acto de entrega de los premios Adepa.
La pelea por la sucesión en la Corte comenzó junto con el año, aunque siempre con mayor urgencia en los círculos políticos y los medios de comunicación que intramuros del máximo cuerpo de la justicia.
En esa carrera -que reveló ser una maratón más que un sprint furioso- el más activo de los jueces fue, como siempre, Ricardo Lorenzetti, quien agotó hasta los límites de la imaginación los recursos para volver a la silla que -según su lectura- le arrebataron hace tres años con malas artes.
Mientras lo desmentía a diestra y siniestra, el jurista de Rafaela desplegó un amplio operativo de seducción para restablecer sus debilitados vínculos con el Gobierno y el kirchnerismo, desde donde no le perdonan su ostensible aliento a los jueces federales que durante la administración de Mauricio Macri investigaron las causas de corrupción contra Cristina Kirchner y sus ex funcionarios.
Rosenkrantz “parece haber claudicado en la idea de una renovación de su mandato y parece estar resignado a aceptar una presidencia de Rosatti, con quien no comparte ninguna idea, principalmente en lo referente a cuestiones empresariales”, señaló. Elena Highton no desea la presidencia ni ha sugerido cuál es su posición. No son pocos los que transitan a diario tribunales que al analizar el actual panorama ven que se estaría tropezando dos veces con la misma piedra. “Esto ya pasó y no funcionó”, dicen en referencia a esa especie de “golpe” liderado por “Pepín” Rodríguez Simón para colocar como presidente del tribunal a Carlos Rosenkrantz.
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