Murió el lunes en la ciudad de Mendoza, Mónica Jara, la docente que resultó gravemente herida tras una explosión en la escuela rural neuquina en la que trabajaba el pasado 29 de junio, según informó la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén.
El sindicato confirmó la muerte de la mujer, de 34 años, quien se encontraba internada desde el 30 de junio en el Hospital Lagomaggiore de Mendoza, con “más del 90 % de la superficie corporal quemada, con compromisos de la vía aérea y del pulmón”, según había informado en los reportes Roxana Cabrera, directora del centro de Salud.
ATEN se movilizó en las principales plazas de las ciudades de la provincia y en la capital convocó a una masiva marcha en el centro de Neuquén, que culminó frente a Casa de Gobierno.
Su secretario general, Marcelo Guagliardo, dijo al hablar en el acto que “esta es una marcha que nunca hubiéramos querido hacer” y señaló: “La escuela no es un lugar para morir”, y cuestionó al Gobierno de la provincia, al que hizo responsable de lo sucedido.
También reclamó al Poder Judicial que “lo que tiene que haber acá es una investigación y una condena ejemplar que ponga a los responsables donde los tiene que poner” y anticipó que ATEN estará movilizado “en unidad y contundencia para exigir la condena que tiene que haber de parte de la justicia”.
El hecho ocurrió el 29 de junio pasado en una escuela rural del paraje Aguada San Roque, a 60 kilómetros de la localidad neuquina de Añelo, y a causa de la explosión también fallecieron los operarios Nicolás Francés y Mariano Spinedi.
La explosión se produjo en un sector en remodelación de la escuela albergue 144, del paraje Aguada San Roque, donde los operarios fallecidos se encontraban trabajando junto a Mónica Jara, ya que se había detectado un inconveniente en un calefactor.
Como consecuencia de la explosión, Francés y Spinedi fallecieron, y la docente tuvo que ser trasladada a la ciudad de Mendoza por la gravedad de sus lesiones.
La investigación iniciada por “delitos de homicidio y lesiones culposas”, a cargo la fiscal jefa Sandra González Taboada, tiene como hipótesis principal que la explosión en la escuela la provocó una fuga de gas”, según informó el Ministerio Público Fiscal.
Aguada San Roque es un pueblo de aproximadamente 300 personas, ubicado a pocos kilómetros de Vaca Muerta y la explosión de la escuela rural generó conmoción entre sus habitantes que inmediatamente salieron a la calle con tachos de agua y mangueras para intentar apagar las llamas.
En el establecimiento, la empresa Arte Construcciones SRL —con domicilio legal en Cipolletti— ejecutaba la ampliación de dos aulas y por esos días, se estaban realizando los trabajos y pruebas finales para la entrega y habilitación de la obra.
NEUQUÉN
Murió la docente herida en la explosión de una escuela
Mónica Jara falleció en la ciudad de Mendoza, donde había sido trasladada. Dos operarios murieron en el hecho.
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