El candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández, le bajó el tono a sus críticas hacia el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, por mantener la neutralidad en la contienda por la Casa Rosada.
Fernández y Schiaretti se cruzaron el pasado domingo en Córdoba en la misa por el primer aniversario de la muerte de José Manuel de la Sota. Luego, repitieron el encuentro en privado en el Hotel Holiday Inn, donde se alojó el postulante a presidente.
“Tuvimos una muy buena charla. Tenemos una mirada muy parecida sobre lo que pasa en la Argentina y sobre lo que hay que hacer”, afirmó Fernández en un diálogo radial.
Dijo además que le da “tranquilidad” saber que contaría con el apoyo de Córdoba en caso de ganar los comicios de octubre porque “es una provincia muy importante”.
Además, el candidato del Frente de Todos señaló que Schiaretti compartió “el diagnóstico” sobre la situación del país y que respaldó su decisión de convocar a empresarios y gremios un consenso de 180 días. “Tiene un diagnóstico parecido y compare los planes que estoy planteando”, aseguró el candidato presidencial.
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