El Central limitó ingresos para evitar “bicicletas”
El Banco Central determinó un freno a capitales foráneos para que no se genere un nuevo atraso cambiario que perjudique la competitividad en la Argentina. Se trata de una herramienta para lograr que los fondos se queden en el país.
A partir de ayer el Banco Central de la República Argentina (Bcra) salió a limitar el ingreso de capitales del exterior que entran para hacer “carry trade” o “bicicleta cambiaria”. El riesgo de esta entrada de fondos internacionales es que nuevamente puede generar una situación de atraso cambiario artificial, generado exclusivamente por la búsqueda de una ganancia financiera.
Es que la disparada del dólar de principio de año tuvo que ver, en parte, con la salida masiva de capitales de los mercados emergentes, que retiraron sus billetes de la plaza y se refugiaron en inversiones más conservadoras.
Inquieto porque esa situación se repita, el Central impuso a partir de este viernes una especie de “encaje” para los fondos que ingresan del exterior a través de los bancos. Apunta a dinero proveniente de líneas de las casas matrices o de fondos del exterior que canalizan inversiones a través de las entidades financieras. Lo hizo a través de Comunicación “A” 6.595 de la entidad.
Así, sólo estarán libres del encaje (es decir serán de libre disponibilidad) los fondos que se queden en el país 365 días. Si el banco quiere sacar antes el dinero deberá dejar un encaje de 2% del monto para plazos de 180 a 354 días; 5%, de 90 a 179 días; 11% entre 60 y 90 días; 17% entre 30 y 59 y un máximo de 23% hasta 29 días. En el último mes la ganancia del “carry trade” rondó el 12%.
“La medida afectará a algún banco. Aparentemente había bancos haciendo esto con las casas matrices”, sostuvo un analista. “Esto es una señal de que el Central no está conforme con el ingreso de capitales de corto plazo”, agregó.
Desde la entidad monetaria, en tanto, explicaron que la resolución apunta a equiparar las condiciones para las distintas opciones de ingreso de divisas con que cuentan los bancos. Por ejemplo, dijeron, si una entidad se fondeaba en el exterior con una Obligación Negociable en dólares a menos de 30 días, tenía que poner 23% de encaje, lo que no sucedía si recibía una línea del exterior de su casa matriz.
La norma se limita a los bancos. Una normativa más amplia que eventualmente limite el ingreso general de divisas tendría que ser establecida por el Ministerio de Hacienda. La quita de esas trabas en su momento por el gobierno de Mauricio Macri fue una de las variables que el Mcsi evaluó positivamente para elevar a la Argentina del status de mercado “de frontera” a “emergente”.
El Bcra debe lidiar ahora con el famoso ingreso de “capital golondrina”, o dinero caliente, que entra a muy corto plazo sólo para conseguir una ganancia financiera a causa de las altas tasas de interés. El problema de este flujo que ingresa del exterior es que empuja hacia abajo el tipo de cambio.