El precio de los combustibles se incrementará desde este fin de semana. Se estima que la suba será de entre 4,3% y 5%, según estudian las petroleras. El alza estará dada por un cambio en un tributo -el impuesto a la transferencia de combustibles- y la devaluación, que superó las expectativas de las compañías.
No será el único aumento: está previsto que para julio las naftas suban otro 3%.
Las empresas y el Ministerio de Energía habían llegado a un acuerdo para congelar los precios por 60 días, hasta julio.
Sin embargo, desde ayer entró a regir una modificación en el impuesto a la transferencia de los combustibles (ITC). Eso obligaba a las compañías a realizar un aumento que promediaba el 1,7%.
Por eso los petroleros le pidieron al ministro de Energía, Juan José Aranguren, que, además de subir por los precios, puedan ajustar algo más por el efecto de la devaluación sobre sus costos (como el petróleo crudo, en dólares).
Las refinadoras estudiaban una remarcación cercana al 3%. Así, el aumento para este fin de semana sería de entre 4,3% y 5%: una parte por el ITC y el resto por mayores costos. En mayo, las petroleras esperaban aplicar una recomposición del 12%; van a esperar hasta julio.
NAFTAS
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