El Comité Central Confederal de la CGT resolvió “facultar al Consejo Directivo para continuar con el diálogo con el Gobierno”, y evaluar la situación luego de las elecciones del 22 de octubre. Con ausencias como las de Hugo y Pablo Moyano, la reunión duró menos de dos horas, durante las cuales hablaron el triunviro Juan Carlos Schmid, Sergio Palazzo (bancarios), Leonardo Fabre (Anses), el taxista Omar Viviani (referente del sector agrupado en el Masa, Movimiento de Acción Sindical Argentino), Julio Insfrán (capitanes del cabotaje) y, para cerrar, los otros dos conductores de la Central, Héctor Daer y Carlos Acuña.
El encuentro se realizó en la sede porteña de La Fraternidad, ubicada a una cuadra del Congreso Nacional. Hubo 142 sindicatos presentes representados por 193 delegados (los gremios chicos llevan un delegado, los medianos dos y los más grandes tres). Pero también dijeron presente Luis Barrionuevo y Antonio Caló.
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La ausencia de Pablo Moyano, que integra el Consejo Directivo de la CGT confirmó su creciente distanciamiento de la conducción de la central sindical: el heredero de Hugo en Camioneros ya se había sacado fotos con candidatos de Unidad Ciudadana y llamó a votar a Cristina o a Massa. A su vez, no fue a ninguno de los dos encuentros que tuvo la CGT con Jorge Triaca.
Aunque se escucharon algunos discursos fuertes respecto al Gobierno y sus políticas, también hubo palabras en pos de la unidad: “El liderazgo de la CGT debe estar por encima de los líderes, con vistas a la unidad”. En la votación final, tal como se esperaba, se decidió no avanzar en una medida de fuerza o protestas hasta tanto no se aclare panorama de las reformas que encarará el Gobierno vinculadas a las reformas laboral y tributaria. Entre las voces más críticas que esperaban escucharse, los presentes prestaron particular atención al discurso de Sergio Palazzo, aunque su moción fue la de esperar a las elecciones del 22. Después, ante los periodistas, sí dijo que “preocupa y molesta cuando el Gobierno generaliza y habla de mafias, cuando tenemos un 30% de pobreza”.
En la conferencia de prensa posterior, Schmid también se refirió a los últimos avances de la Justicia sobre algunos líderes sindicales, uno de los temas calientes de la semana: “No existe una mafia sindical, sino casos aislados”, advirtió. Y señaló que lo mismo pasa en otras esferas de la vida pública, incluidas las empresas y el Gobierno.
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