Tras la noche de violencia que se vivió el jueves en La Plata, el gobierno bonaerense analiza a dos hipótesis investigativas en torno de los autores de los desmanes. Una de ellas apunta a que se trató de un “desprendimiento” de una marcha en reclamo de la aparición con vida de Santiago Maldonado y otra vinculada a medidas tomadas por la gestión provincial que afectan “intereses” vinculados con “mafias, parte del sistema policial y el narcotráfico”.
Si bien oficialmente no se descartó la primera alternativa que hace foco sobre grupos violentos que se definen como anarquistas, en la administración bonaerense volvieron a poner la lupa sobre efectivos de la policía que fueron desafectados tras investigaciones de Asuntos Internos.
“Ataques premeditados”
La administración de María Eugenia Vidal salió a fijar posición y calificó de “premeditados” los hechos que afectaron a dependencias del Senado, Casa de Gobierno y un banco privado ubicado sobre avenida 7, que se registraron mientras se desarrollaba una marcha en reclamo por Maldonado.
Sin embargo, el hecho más preocupante se produjo minutos después en la sede del ministerio de Seguridad, cuando desconocidos con bidones de nafta y pólvora incendiaron dos autos frente a ese organismo en calle 2 entre 51 y 53.
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