La presidenta Cristina Kirchner participó ayer de la ceremonia religiosa que ofició el Papa Francisco en la Plaza de la Revolución, y luego, antes de emprender el regreso a la Argentina, mantuvo un encuentro con el líder cubano Fidel Castro.
Junto al presidente de Cuba, Raúl Castro, y la delegación oficial del Gobierno que está encabezada por el canciller Héctor Timerman, Cristina fue parte de la masiva celebración litúrgica que presidió Francisco.
Una vez concluida la misa, que se extendió por más de una hora y media bajo un intenso calor en La Habana, el Papa saludó a la Presidenta, quien fue invitada por su par cubano.
La mandataria llegó el sábado a Cuba para formar parte de una de las actividades de la visita del pontífice a la isla y mantener contactos con las autoridades cubanas. Tras la misa, el Sumo Pontífice le dio un apretón de manos a la jefa del Estado y mantuvieron un breve diálogo. Fue un saludo protocolar, tal como se prevía.
Francisco también le estrechó la mano al presidente Raúl Castro, a quien le agradeció minutos antes "todos los esfuerzos" en el proceso de negociación de paz de Colombia que se realizan en La Habana.
En un encuentro con la prensa, en el Aeropuerto Internacional José Martí antes de volver al país a bordo del avión presidencial Tango 01, Cristina se refirió a la homilía del Papa. "Me gustaron mucho sus palabras: fue un sermón muy interesante" porque "habla del vulnerable y del pobre, y de que nadie puede sentirse cristiano si no los contempla", ya que hizo "alusión a esa parte del Evangelio en donde los apóstoles se pelean para ver quién es el más importante y a partir de allí da su sermón", mencionó Cristina.
"La idea de que el más importante es el último y el que sirva más a los vulnerables, pobres y necesitados me parece que es toda una idea, y yo le dije que casi me hizo pensar en 'la patria es el otro' cuando estaba dando el sermón", afirmó la jefa de Estado. "La verdad es que insistimos mucho con esta idea y hoy dijo eso que es de buen cristiano, que el más importante sea el que mejor sirva a los que menos tienen", por lo que le "pareció un sermón más que interesante a aplicar en el mundo y también en Argentina", consideró la mandataria.
Sobre la misa sostuvo que fue "muy emotiva y shockeante", y afirmó: "Creo que estar ahí en la Plaza de la Revolución, era como que el Che Guevara nos estaba mirando a todos, lo miraba al Papa, que estaba a la izquierda del monumento".
Durante su gira de dos días por la isla, la Jefa de Estado se reunió el sábado por la noche con Raúl Castro en una cena de honor que brindó el mandatario en el Palacio de la Revolución, la que consideró "muy buena". Consultada al respecto, Cristina contó que estuvieron "intercambiando opiniones sobre lo que pasa en el mundo y en la región", y que se trató de un "encuentro de amigos", ya que también "estaban los cancilleres y los embajadores."
MULTITUDINARIA CELEBRACIÓN RELIGIOSA EN LA PLAZA DE LA REVOLUCIÓN DE LA HABANA
Cristina Kirchner participó de la misa del Papa en Cuba y se reunió con Fidel
La Presidenta saludó a Francisco luego del masivo acto litúrgico en la capital cubana. Fue un saludo protocolar, tras el cual la mandataria se dirigió al encuentro del ex líder de Cuba antes de emprender el regreso al país. No hubo detalles de la reunión.
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