Los Spurs anunciaron que Victor Wembanyama, su gran figura, no jugará más en la temporada 2024-25 debido a una trombosis venosa profunda en el hombro derecho. El problema fue detectado tras el regreso del jugador del All-Star Game, lo que llevó a los servicios médicos de la franquicia a tomar la drástica decisión de apartarlo por precaución. El diagnóstico significa que el francés quedará inhabilitado para premios como el All-NBA o el Jugador Defensivo del Año, ya que no alcanzará el mínimo de 65 partidos requeridos.
Antes de su baja, Wembanyama estaba firmando una temporada descomunal con promedios de 24.3 puntos, 11.0 rebotes, 3.7 asistencias y 3.8 tapones por encuentro, liderando la liga en este último rubro. Además, fue elegido All-Star por primera vez en su carrera y era una pieza clave en las aspiraciones de San Antonio, que con récord de 23-29 aún soñaba con el play-In. Ahora, la responsabilidad de sostener al equipo recaerá en De’Aaron Fox, flamante refuerzo, junto a Stephon Castle y Harrison Barnes.
Los Spurs se encuentran a 3.5 partidos del 10º puesto del Oeste, pero sin Wembanyama, su panorama cambia drásticamente. La trombosis, aunque descubierta a tiempo, deja en vilo su recuperación. Casos previos, como el de Brandon Ingram en 2019, mostraron que el regreso a la actividad puede tardar meses, lo que genera incertidumbre sobre su preparación para la próxima campaña. San Antonio no solo pierde a su estrella, sino que también ve comprometido su futuro inmediato.
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