El Linqueño Rugby cuenta con, aproximadamente, 100 chicos que practican el deporte durante todas las semanas. En la actualidad, la institución de Lincoln compite en el certamen organizado por la Unión de Rugby del Oeste de Buenos Aires (Uroba).
Para incrementar la participación de chicos en el deporte, el club comenzó a practicar en espacios públicos, para intentar captar la atención de los jóvenes y que puedan aprender más sobre el rugby.
Hernán Mattiazzi, director deportivo de la disciplina en el León, dialogó con Democracia y explicó la novedosa idea y de qué manera comenzó.
“La idea de entrenar en espacios públicos fue de Marcos Rigo, que es un entrenador de infantiles”, comentó. “Luego de una jornada con infantiles en Chacabuco, Marcos se llevó algunos chicos a jugar al fútbol a una cancha de su barrio, donde se fueron sumando un montón de jóvenes con la intención de participar”, indicó.
“Luego de eso, él me llamó y me comentó que estaría bueno organizar algo así en el mismo lugar. Entonces decimos hacer una jornada con el nombre de ´rugby itinerante´”, detalló. Mattiazzi, que desde el 2016 está en la institución de Lincoln, dio detalles sobre la primera jornada que se desarrolló el sábado pasado y sostuvo que “la idea es hacerlo con frecuencia”.
“El sábado pasado llevamos a cabo la primera jornada, nos acompañaron padres y diferentes alumnos del club. Además, se sumaron cinco chicos nuevos, de los cuales dos siguieron entrenando en El Linqueño. Fue una tarde recreativa”, aseguró. “La idea es hacerlo con frecuencia. Nosotros, cada quince días, tenemos encuentros de infantiles, entonces pensamos hacerlo cuando no tenemos competición”, manifestó.
El director deportivo del club contó las expectativas que tenían en la previa a la iniciativa.
“No esperábamos la repercusión que tuvo. En la próxima jornada vamos a intentar darle un poco más de difusión. Nos pareció súper interesante”, detalló. “Las expectativas en cuanto a la iniciativa es que se difunda el rugby y que se sumen más chicos al club. El objetivo es incorporar jugadores”, declaró.
Mattiazzi, que además es entrenador de la categoría M-12 y M-18, anunció que el club organizará otra jornada en espacio públicos.
“La próxima jornada la vamos a realizar el Barrio Obrero. Ahí hay una plaza con una cancha de fútbol y un parque en frente. La vamos a llevar a cabo el primer sábado luego de las vacaciones”, confirmó.
Panorama deportivo
El director deportivo de El Linqueño Rugby comentó la actualidad del equipo y habló sobre las diferentes categorías que componen al club.
“En las categorías infantiles, desde hace dos años, tenemos asistencia perfecta en todos los encuentros. La idea es asistir siempre para no fallarles a los clubes que organizan la jornada”, expresó. “Además, en las infantiles contamos con todas las categorías: M-6, M-8; M-10 y M-12. Este año tenemos muchos chicos de Kinder”, contó.
Mattiazzi se refirió al trabajo que realiza la institución en las juveniles y expresó que “estamos muy satisfechos”. “Por su parte, en las juveniles estamos bien en todas las divisiones (M-14, M-16 y M-18). El año pasado, la M-16 ganó el Seven de la categoría y la Copa de Bronce”, declaró.
“Estamos muy satisfechos con el trabajo que venimos realizando. En M-16 venimos aportando jugadores para el seleccionado que conforma la Uroba”, manifestó. Desde hace algunos años, El Linqueño Rugby no cuenta con Primera División, y Mattiazzi contó cual es el principal problema a la hora de conformar el plantel.
“Uno de los problemas principales es que cuando los chicos de M-18 tienen que subir a Primera se van a estudiar”, comentó. “Desde que estoy en el club, siempre costó armar un plantel de Primera División que se mantenga en el tiempo”, afirmó.
El director deportivo recordó las obras que realizaron en el último tiempo en las instalaciones donde practican la actividad.
“Cuando llegué al club, el quincho contaba con baños y los vestuarios estaban divididos por una mampara de madera. Antes de participar en la subcomisión, insistía en que los jugadores debían disponer de vestuarios propios con duchas”, indicó. “Luego, se le agregaron dos vestuarios nuevos con duchas. Además, se agrandó un poco la cocina y, al año siguiente, pusimos los cerámicos”, remarcó.
Por último, Mattiazzi contó las próximas obras que se podrían realizar en la cancha de El Linqueño Rugby.
“Estamos con intenciones de iluminar una de las canchas para estar un poco más cómodos, ya que al tener tanta cantidad de chicos se hace un poco complicado”, manifestó. “El quincho está en buenas condiciones, lo único que le faltaría es techarlo, ya que la parte superior es de paja. El anhelo es ponerle chapa”, concluyó.
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