River y San Lorenzo se olvidaron de jugar

En un partido que quedará en el olvido rápidamente por el nivel paupérrimo durante los 90 minutos, River y San Lorenzo igualaron 0-0. El punto fue mejor recibido por el equipo de Ricardo Caruso Lombardi, que necesita sumar para escaparse de la zona de descenso, lugar que por ahora ocupan Unión, Independiente y San Martín de San Juan. Para el conjunto de Almeyda, el empate le trae la frustración de quedar a dos puntos del líder Boca, pero muy lejos en el juego.
Durante el primer tiempo, ambos equipos se respetaron demasiado y no arriesgaron nunca. Esto provocó que el juego se volviera anodino, repetitivo y sin emociones en ninguno de los dos arcos. Mientras Manuel Lanzini no podía hacerse cargo de comandar el juego de River y se sucedían las imprecisiones de Rogelio Funes Mori y Trezeguet, la férrea estrategia en sus dos líneas de cuatro por  parte de San Lorenzo, dejaba pocas esperanzas para la creatividad y las sorpresas.
La más clara de los primeros 45 minutos la tuvo Jara, que tras un centro de Buffarini hizo temblar el travesaño de Barovero.
Ya en el segundo tiempo, Almeyda decidió mover el banco de suplentes: metió al ecuatoriano Juan Cazares por Lanzini y poco después a Daniel Villalva por Sánchez. Pese a las intenciones del entrenador para tener mayor movilidad y frescura en ataque, ambos jugadores se mimetizaron con las imprecisiones que se desarrollaron a lo largo de un partido realmente horrible.
Pese a la falta de juego, River pudo haberlo ganado en dos tibias chances. Primero, con un cabezazo de Rogelio Funes Mori, que atrapó Migliore, a once minutos del final del partido. Luego, Ponzio, una de las figuras del encuentro al ser el que menos pases erró, probó con un remate frontal desde 30 metros, pero otra vez el arquero visitante estuvo seguro en la respuesta.