Sarmiento no encontró los caminos y se debió conformar con un punto ante Deportivo Merlo

Sarmiento siguió sumando en el campeonato de la Primera “B” Nacional y empató como local contra Deportivo Merlo sin abrir el marcador. Un resultado que dejó gusto a poco por cómo se dio el partido, donde el equipo juninense tuvo un jugador más desde los 26 minutos del primer tiempo por la expulsión de Leonel García en la visita y después jugó aproximadamente los 25 últimos minutos del cotejo con dos futbolistas más por otra expulsión en el rival, Matías Díaz.
Si bien el balance arroja un saldo positivo al cabo de dos fechas, con la suma de cuatro unidades sobre seis posibles, ayer quedó la sensación que se escaparon dos puntos.
La incógnita antes de la disputa del encuentro pasaba por cómo Sarmiento iba a resolver el planteo defensivo de Deportivo Merlo y por ahí pasó el problema que finalmente el local no pudo afrontar con éxito. De todas maneras, el equipo dirigido técnicamente por Sergio Lippi insinuó por momentos que podía hallar el desequilibrio y fue cuando logró generar peligro en escasas ocasiones.
El conjunto dueño de casa estuvo bien parado en defensa ante un rival que exigió muy poco y en casi todo el partido el guardameta Lucas Ischuk se convirtió en un espectador más.
La iniciativa le correspondía al once juninense, pero no le resultaba sencillo encontrar espacios ante un Deportivo Merlo que los achicaba muy bien a partir de mantener un prolijo orden defensivo.
Lucas Oviedo hizo un interesante primer período porque mostró una movilidad que le permitió tener desequilibrio y fue protagonista de las dos únicas llegadas más claras, aunque no de mucho peligro. Ambos tiros se fueron altos, en forma desviada.
Los delanteros, Cerutti y Cuevas, estuvieron bien marcados, e impidiéndoles que se junten con los volantes, que no pudieron sorprender y lo mismo que Dematei, proyectándose en algunas ocasiones.
Deportivo Merlo exhibió un arquero seguro como Giordano, una firme línea de fondo donde se destacaron sus dos centrales, Sebastián Díaz Villar y Gastón Cepeda, y el gran despliegue en la zona media, donde Fernando Lorefice fue su figura más saliente.
En ofensiva, los dirigidos técnicamente por Néstor “Caqui” Ferraresi propusieron muy poco porque sólo hubo algunos intentos individuales. Un tiro débil de Blanco Leschuck, que nació en una falla defensiva, fue lo rescatable de la visita y el envío finalizó en las manos del arquero Ischuk.

Insistencia en la búsqueda

Sarmiento comenzó el complemento con la insistencia en la búsqueda de la diferencia y tratando de usufructuar el jugador de más.
Con tal fin, el técnico Sergio Lippi dispuso el ingreso de Luis “Popi” Quiroga, para hallar otra opción para el desborde en ataque, en reemplazo de Yamil Garnier, más caracterizado por la marca.
Por cierto que, un par de apariciones de Quiroga y la inteligencia de Andrizzi para moverse en ofensiva posibilitaron que Sarmiento llegara con riesgo, pero terminó por no ser suficiente y tal vez se debió insistir más con la media distancia que podía complicar al guardameta Giordano por el estado del campo de juego. Por ejemplo, tras un remate de Cerutti, el golero no pudo retener y Andrizzi casi convirtió, aunque salvaron los defensores.
Un tiro de Quiroga, que exigió un rechazo del guardavalla visitante, y dos habilitaciones de este jugador para Andrizzi se transformaron en acciones donde Sarmiento pudo encontrar la apertura. En una de ellas, la pelota impulsada por el experimentado volante dio en la parte exterior de la base del palo derecho del “1” visitante y en la otra controló abajo el guardameta.
Deportivo Merlo se preocupó sobre todo por defender y casi resignó atacar, donde primero dejó solo a Blanco Leschuck, quien después salió y entonces fue el ingresado Osvaldo Blanco que debió luchar ante toda la defensa verde.
La visita llegó solo en el tercer minuto de adicional y un tiro por arriba a colocar de Gonzalo Menéndez salió cerca del ángulo superior izquierdo del arquero Ischuk.
A Sarmiento le faltaron variantes ofensivas como para llegar al gol, aunque mantuvo el orden y conserva su valla invicta.