El futbol mundial está de luto. Hoy se fue Sven-Göran Eriksson el célebre entrenador de fútbol sueco que dirigió las selecciones de cuatro países, conquistó títulos en múltiples ligas y se ganó el respeto de sus pares por haber demostrado su capacidad para adaptarse a diferentes culturas futbolísticas y estilos de juego.
Dirigió equipos en Europa, América y Asia, mostrando una gran flexibilidad y comprensión del juego global. Y fue elogiado por muchos jugadores argentinos que fueron dirigidos por él. Por ejemplo, dirigió a Ramón Díaz en la Fiorentina y a jugadores como Diego Simeone, Matías Almeyda y Juan Sebastián Verón en la Lazio, ambos equipos italianos.
Pero también se lo tenía como una referencia amarga para la Argentina: en el 2002, la Selección argentina de Rafael Bielsa se topó en octavos de final con la Inglaterra de Eriksson y quedó eliminada por 1-0.
A Eriksson se lo reconocía también por su enfoque táctico, su capacidad para motivar a los jugadores y su habilidad para gestionar equipos en situaciones de alta presión.
Había debutado como jugador en su país en 1966 y se retiró en 1975. Fue una carrera sin pretensiones como lateral derecho después de la cual Eriksson experimentó un gran éxito en la gestión de clubes entre 1977 y 2001, ganando 18 trofeos con una variedad de clubes de liga en Suecia, Portugal e Italia; se convirtió en el primer entrenador en ganar un doblete de liga y copa en tres países.
Entre 2001 y 2006 el sueco dirigió a los ingleses. Durante esa época, llevó a ese equipo a clasificar en los cuartos de final del Mundial de 2002 y 2006 y de la Eurocopa de 2004. Fue el primer entrenador no británico en dirigir la selección de Inglaterra y logró darle una de sus mejores performances en mundiales.
También fue entrenador de México entre 2008 y 2009, pero no logró llevar al equipo hacia la clasificación al mundial de Sudáfrica.
A lo largo de su vida, entrenó también a Costa de Marfil y Filipinas, así como a una docena de clubes. "Tuve el mejor trabajo del mundo y fui feliz todos los días durante largos periodos. Ha sido fantástico", les dijo Eriksson a sus hijos luego de enterarse en enero de este año que su diagnóstico le daba una esperanza de vida de máximo un año.
Finalmente, su familia, informó hoy el fallecimiento de Sven-Göran Eriksson a sus 76 años, a causa de un cáncer.
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