Yamil Garnier: “Era el momento de decir basta y pensar un poco más en mí”
El excapitán del Verde habló con Democracia sobre la decisión de dejar el fútbol profesional y revivió los momentos más importantes con la camiseta del equipo juninense. “Obviamente que son los logros. El campeonato, en el 2011, fue el más importante porque me dio la posibilidad de ser un jugador activo, durante todo el torneo, con la importancia y lo que implicaba ese ascenso para el club”, expresó.
Sarmiento anunció, el lunes pasado, el retiro del fútbol profesional de Yamil Garnier, quien llegó a la institución en junio de 2011, se convirtió en capitán del equipo durante varias temporadas y fue protagonista de dos títulos: el campeonato de la B Metropolitana 2011/12 y el campeonato de la B Nacional 2020/21.
Con 41 años, el histórico defensor del Verde, donde disputó más de 190 partidos oficiales, habló con Democracia sobre la decisión de dejar la actividad profesional y revivió los momentos más importantes con la camiseta del equipo juninense.
-¿Tenías tomada la decisión del retiro o fue de un día para otro?
-La realidad es que ya hace un tiempo lo venía meditando, trabajando y viendo que iba a pasar en cualquier momento. Obviamente que uno nunca quiere que llegue, pero dadas las circunstancias y las situaciones personales con el tema de mi físico y el ofrecimiento del club, todo sirvió para que diga basta y tomé la decisión de no jugar más.
-¿Es muy exigente el nivel en Primera División?
-Sí, en todas las divisiones en realidad. El fútbol, con el correr de los años, es cada vez más físico, pero a mí, de fin de año para acá, la rodilla me empezó a molestar y no me sentía al 100 por ciento. No era bueno ni para mí, ni para el club, no me sentía bien y no podía estar al 100 por ciento para dar lo mejor, desde el lugar que me toque.
Tengo 41 y hay muchos años arriba de este cuerpo, era el momento de decir basta y pensar un poco más en mí y no tanto en el orgullo de seguir jugando.
-¿Tuviste inconvenientes con la rodilla que te operaste unos años atrás?
-Sí, la misma. Tengo dos operaciones y los huesos se van gastando. Más allá de que uno haga trabajos preventivos y trate de cuidarse al máximo, hay cuestiones inevitables del propio cuerpo.
-¿Cuáles fueron los tres momentos más importantes que viviste dentro del fútbol?
-Obviamente que son los logros. El primero es el campeonato con Sarmiento, en el 2011, que fue el más importante porque me dio la posibilidad de ser un jugador activo, durante todo el torneo, con la importancia y lo que implicaba ese ascenso para el club.
Después, el ascenso a Primera con Colón de Santa Fe, en el 2014, y el último fue el ascenso con Sarmiento, ya en mi vuelta, también a Primera, en el 2020.
-¿En qué lugar entra el gol a Unión en un clásico santafesino?
-No sé, no hice muchos goles en mi carrera. Creo que tengo 33 en 20 años. Cada gol significó algo importante, si sirven para triunfos y más si son trascendentales como en un clásico. No lo pongo en un podio, pero sí dentro de los más importantes.
-¿Por qué elegiste Sarmiento y Junín para pasar la mayor parte de tu carrera como jugador profesional?
-En su momento cuando me llamó Sergio Lippi, en el 2011, acepté venir y ahí arranqué mi vida como deportista, en Junín. Siempre me sentí muy cómodo, la ciudad me fue muy familiar y los logros y las campañas llevaron a que uno se sienta cómodo.
Hoy, en el fútbol argentino, no es fácil estar tantos años en una institución, pero yo me sentí importante y creo que para el club fue de la misma manera, pasa un poco por ahí.
-¿Qué te dejó el fútbol?
-Muchísimas cosas. Muchos amigos y muchos conocidos, más allá del fútbol. Gracias a este deporte, conocí gente que no tiene nada que ver con el fútbol e hice muchas relaciones, sobre todo desde la parte social, que es lo que queda.
Más allá de lo que uno fue como jugador, lo que queda es la persona, las amistades y relaciones que hacemos. Ese es el logro más importante de mi carrera, más allá de los deportivos.
-¿Cómo ves al equipo para el próximo semestre?
- Va a ser difícil porque hay unas cinco fechas de transición y no se pueden traer jugadores. Es medio raro porque jugas cinco partidos sin contar con los jugadores que vos quieras, es difícil pero no imposible.
Creo que Israel Damonte va a tener el tiempo para poder plasmar su idea, con los que ya están y los que vengan y eso va a ser importante. Ojalá el equipo refleje lo que él realmente desea. Es un desafío importante porque van a ser cinco partidos que van a marcar para qué va a estar Sarmiento.
-¿Tenés pensado qué vas a hacer a futuro? ¿Vas a trabajar en algun área del club?
-Sí, una de las cuestiones que me llevó a tomar esta decisión fue el ofrecimiento de Fernando (Chiófalo) para que siga ligado al club, aunque todavía no tengo decidido en qué lugar.
Es todo nuevo lo que está sucediendo, estoy encontrándome con situaciones y lugares que desconozco, así que estoy aprendiendo y viendo dónde puedo ser útil y dónde le sirva mejor al club. El tiempo me pondrá en el lugar que corresponda.
-¿Cómo te gustaría que te recuerden los hinchas de Sarmiento?
-Como un buen tipo, más allá de lo deportivo y de la imagen que uno dejó como jugador. Lo más importante es que a uno lo recuerden como buena gente, como hombre de bien, y creo que es un poco o que se reflejó en estos últimos días con infinidad de mensajes de muchos compañeros y gente del fútbol que me conoció, que para mí es mucho más importante que un logro deportivo.