“Picu” Molina, la joya surgida de la cantera verdolaga.
ANÁLISIS - COPA DE LA LIGA

Rumbo errático y falta de jerarquía: así fue la participación de Sarmiento en el torneo

De un valioso empate ante Boca, pasando por una histórica victoria contra Racing en el Cilindro de Avellaneda, al desconcierto por la gran cantidad de derrotas y la falta de gol. Tres técnicos en 14 fechas en las que el Verde registró dos victorias, tres empates y nueve derrotas. Pese a ello, lo más valioso fue la participación de los juveniles, siendo Molina la figura más destacada.

La etapa regular de la Copa de la Liga Profesional llegó a su fin y con ella la participación de Sarmiento. Si bien actualmente se están desarrollando las instancias finales de eliminación, en lo que popularmente se conoce como “mata-mata”, vale resaltar que este torneo, que sí contribuye a los promedios, no tuvo descensos. De tal forma, y a diferencia del campeonato anterior, varios equipos no se vieron en la urgencia de sacar puntos ni tener una calculadora en la mano para saber cómo se encontraban las cosas domingo a domingo.

Según la Real Academia Española, el término “errático” significa que “se mueve sin rumbo fijo o sin asentarse en un lugar. Impredecible o que cambia con frecuencia”.

Distinto a lo que sostiene el sentido común, errático no quiere decir que una persona o institución comete muchos errores, sino que hace referencia a una imprevisibilidad o estar desorientado. Tal adjetivación es la que mejor le asienta al torneo que tuvo el Verde: potenciado por la falta de jerarquía para definir partidos y traducido en los puntos obtenidos, siendo el tercer equipo con menor cantidad conseguida con 9 unidades (detrás de Tigre con 5 e Independiente Rivadavia que logró 8).

Números

La fase regular de la Copa de la Liga Profesional tuvo 14 partidos, sumado a las instancias de play-offs que aún se están disputando y a las que Sarmiento no accedió.

Abordando propiamente los números, el Verde registró dos victorias, tres empates y nueve derrotas. Durante ese recorrido tuvo una marca de 9 goles a favor y 19 goles en contra, lo que deja un saldo negativo de -10, siendo el cuarto equipo con peor diferencia de gol detrás de Tigre (-18), Atlético Tucumán (-15) e Independiente Rivadavia (-12).

Asimismo, en lo que hace a los goles realizados, Sarmiento también se ubica entre los cuatro equipos que menos convirtieron por encima de Atlético Tucumán (6), Tigre y Riestra (ambos con 7). De hecho, de las 14 fechas disputadas, en 8 partidos Sarmiento no realizó ningún gol.

Como parte de las complejidades que tuvo el juego del Verde, una de las que se puede ver es la ausencia de peso en el área rival, es decir, una figura/referente en ofensiva con determinación. En tal sentido, al analizar los goleadores que tuvo el plantel durante el torneo se puede notar que fueron autores eventuales de la circunstancia: Lisandro López (2); Gabriel Díaz, Juan Insaurralde, Fernando Godoy, Sergio Quiroga, Mauri, Agustín Molina y Joaquín Gho (1).

Presencias 

De las 14 fechas disputadas, que representan 1260 minutos en total, sumado a los tiempos adicionales de cada jornada, encabeza la lista de presencias el arquero Fernando Monetti junto al marcador central Insaurralde.

Como parte de la columna vertebral que ha sabido tener el equipo, y como referencia en la mitad del campo, en segundo lugar, está Godoy con 1190 minutos. 

Más atrás, es decir, a partir del cuarto puesto con mayores presencias se ubican los juveniles surgidos en el club, como el lateral Díaz, el volante Manuel Mónaco, entre otros.

En lo que hace al área de las sanciones, el plantel del Verde acumuló 36 tarjetas amarillas y únicamente la tarjeta roja (doble amarilla) que tuvo como protagonista a Quiroga en la última fecha frente a Platense.

Sistemas tácticos

Producto de haber tenido tres entrenadores a lo largo de una temporada corta, el Verde osciló entre distintos sistemas sin terminar de consolidar una forma concreta.

En el marco del ciclo de Sergio Rondina se probaron diversos sistemas: 4-3-1-2, 5-3-2, 4-4-2 y 4-3-3. Esta primera etapa se caracterizó por empates y derrotas.

En segundo lugar, bajo el interinato de un hombre del club como es Martín Funes, ante Barracas se utilizó un sistema de 4-2-3-1 y culminó en una igualdad sin goles.

La tercera instancia, y cierre, estuvo caracterizada por el regreso de Israel Damonte al club que probó distintos esquemas: 5-3-2, 5-4-1 y 4-4-1-1. Con ellos ganó, empató y perdió.

Por otro lado, en el mundo del fútbol quedó demostrado que los partidos se pueden ganar por intermedio de distintas tácticas y estrategias que tengan, o no, a la tenencia del balón como elemento central.

En este sentido, respecto al porcentaje de posesión del balón, a lo largo del torneo tan solo en tres ocasiones hubo un predominio del equipo de nuestra ciudad: contra Central Córdoba, Lanús y Belgrano. En el resto de los partidos se vio superado, inclusive en los dos partidos que ganó.

A diferencia del torneo anterior dirigido por Damonte, en esta ocasión el ser local o visitante no significó un factor a considerar, ya que el equipo ganó un encuentro en Junín y otro de visitante y, a su vez, perdió tanto de local como de visitante. 

Identidad

Siguiendo tal perspectiva comparativa, cuando uno empieza a observar detenidamente los números registrados en este torneo y los compara con los del campeonato anterior, se puede ver lo alarmante del caso.

En la edición anterior de la Copa de la Liga, que el Verde concluyó con un importante triunfo en Rosario ante Newells, cuando todavía estaba a la espera de diversos resultados para ver si conseguía una histórica clasificación, Sarmiento tuvo una marca de tres victorias, siete empates y cuatro derrotas.

Lo rescatable de dicho contexto es que el Verde era un equipo complicado para jugar o, en otras palabras, un rival difícil, ya que generaba las condiciones para mínimamente llevarse un empate. En tal sentido, fue un equipo que hizo ocho goles y que recibió la misma cantidad: hasta en ese dato se puede ver el detalle del equilibrio al que se hace referencia. 

En el presente la realidad demuestra lo contrario: un equipo que, por cada gol que hace, recibe dos (9 a favor y 19 en contra). Podría reconocerse cierto infortunio o poca efectividad en el área rival, pero lo cierto es que a Sarmiento le falta jerarquía para torcer el presente.

Pudo verse un pasaje de dicha jerarquía contra Racing y Estudiantes, cuando, en Avellaneda, logró resistir el resultado y conseguir una victoria histórica; como así también cuando revirtió el resultado ante el Pincha en Junín. Pese a ello, dejando de lado estos dos cotejos (que resultaron ser historias aisladas), el equipo careció de dicho rasgo para sumar más puntos.

Contra Lanús, Unión, Newells y Godoy Cruz el Verde cayó por la mínima con un mismo denominador común, que diferencia a los clubes de la máxima categoría a nivel nacional: la jerarquía para aprovechar lo que se genera.

Juveniles

Un hecho a hacer mención y resaltar es la participación de juveniles surgidos en el club que nutren el plantel de Primera.

Como demuestran desde hace un tiempo los casos del lateral Díaz o el volante Mónaco, en este torneo tuvo mayor rodaje Gho como así también los distintos debuts que darán que hablar en el presente y el futuro: el lateral Jeremías Vallejos (21 años) y los delanteros Diego Azcurra (25) y Tomás Guiacobini (19).

Aquí vale hacer una mención destacada al rol ocupado por Agustín Molina, el más joven de todos los citados, quien con solo 17 años tuvo su bautismo en la máxima categoría y, a su vez, también convirtió su primer gol en Primera.

Todos casos de futbolistas, como se dice popularmente, “Made in Sarmiento” que, si son potenciados por una idea y orden de juego, junto a jugadores de jerarquía, sin dudas van a conformar un cambio determinante en el andar del equipo.

Copa Argentina

Un caso más de los traspiés del Verde en esta competencia: la edición del 2024 no fue la excepción. Las eliminaciones previas ante All Boys, Deportivo Morón, Deportivo Merlo, Los Andes, Atlético Tucumán, Talleres y las dos últimas experiencias ante Temperley dan muestras de lo expuesto. 

El último partido disputado ante el Gasolero en Caseros, un rival de menor envergadura que no se hallaba entre los primeros cuatro de la Segunda división, terminó siendo una nueva desilusión para el equipo de nuestra ciudad que se vio superado en los penales tras igualar en 1.

En aquella oportunidad desarrollada el 27 de febrero, el DT Damonte le dio minutos a quienes no lo tenían en la Copa de la Liga Profesional, viéndose un equipo alternativo en gran parte.

Futuro 

Con esta campaña en Sarmiento, el entrenador Israel Damonte alcanzó la marca de 126 partidos dirigidos como entrenador de la máxima categoría, con 35 triunfos, 36 empates y 55 derrotas. De tal forma, registra un 37% de efectividad y el próximo torneo con el Verde será una buena oportunidad para mejorar tales números.

No obstante, vale recordar que, anteriormente, durante el 2022, Damonte fue quien condujo a Sarmiento a coquetear con la idea de clasificar a una copa internacional (Copa Sudamericana), viéndose truncada en las últimas fechas tal posibilidad. 

Sin embargo, el DT fue claro en el mensaje en la última conferencia de prensa el pasado fin de semana: “El que quiera estar, que esté. El que no quiera estar, lo hablé con los jugadores y hablaré con la dirigencia, tiene libertad para ir a cualquier equipo de la Argentina”.

Hoy, cuando aún resta conocer al nuevo consagrado del torneo, el futuro del Verde es una incertidumbre que dependerá de distintos factores, como el mercado de pases, los promedios y el funcionamiento del equipo. Un escenario de desconcierto que espera cambios y resultados para asegurar la continuidad en Primera.

El plantel de Sarmiento pone primera 

El plantel de Sarmiento pone primera hoy por la tarde, en el Centro de Alto Rendimiento, bajo las órdenes de Israel Damonte. 

Los futbolistas están citados para las 17 y volverán a las prácticas, luego de siete días de descanso, de cara al próximo semestre que tendrá la competencia del torneo de la Liga Profesional. 

El certamen comenzará el 12 de mayo y el 12 de junio (tras la fecha 5) se detendrá por la Copa América. Luego se reanudará el 21 de julio y finalizará el 15 de diciembre.

El Verde tendrá que afrontar los primeros cuatro partidos con el mismo plantel que culminó la Copa de la Liga, ya que el mercado de pases abrirá, recién, el 1 de junio. El libro cerrará el 30 de agosto y no habrá límite para refuerzos.

En la quinta jornada, programada para el miércoles 12 de junio –antes del extenso parate por la Copa América 2024-, el equipo juninense tendrá la posibilidad de usar a los refuerzos que llegaran a la institución hasta ese entonces. Los demás podrían debutar cuando se reanudase la competencia local, poscertamen continental.

A raíz de la lesión de ligamentos cruzados de Agustín Molina, Sarmiento intentará elevarle un pedido a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) para incorporar un jugador y, así, suplir la baja del volante de 17 años.