El malestar que bajó desde los tres costados del Eva Perón luego de la caída ante Lanús refleja el malestar generalizado de los hinchas de Sarmiento para con el equipo, que aún no conoce la victoria en la Copa de la Liga y, de a poco, comienza a mirar de reojo la tabla de promedios.
La derrota ante el Granate (1 a 0) fue la gota que rebalsó el vaso en Junín y los simpatizantes despidieron al Verde con silbidos al unísono cuando Andrés Gariano pitó el final del encuentro. Esta situación hizo que el elenco juninense se fuera al vestuario sin saludar a su gente.
Lo cierto es que el conjunto de Junín acumula una larga racha negativa que colmó la paciencia de los hinchas: de 15 puntos sumó solamente dos, se ubica a uno del último y se complicó, nuevamente, en la tabla de promedios.
La falta de ideas, la poca respuesta ante un gol en contra y la seguidilla de partidos en pocos días fueron los obstáculos principales de Sarmiento, que no tiene tiempo para trabajo ni lamentos.
La próxima fecha será el lunes, dentro de cinco días, ante Belgrano, en Córdoba. Este duelo será una prueba de fuego para todo el equipo y, especialmente, para Rondina, que sabe que tiene que traerse una victoria como sea para ganar aire y empezar a diagramar lo que viene con más confianza.
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