Felicidad y alivio en los rostros de Sarmiento.
Felicidad y alivio en los rostros de Sarmiento.
PUNTO DE VISTA

El DT volvió a encontrar la respuesta del plantel en el momento más difícil

Mario Sciacqua superó ayer una nueva situación definitoria para la continuidad de su ciclo y Sarmiento busca hacer base en el triunfo ante Platense para emprender una nueva recuperación.

El ciclo de Mario Sciacqua como DT de Sarmiento avanza con los altibajos en la marcha como una constante desde su inicio, hace menos de un año.
En Primera División, su equipo nunca terminó de encontrar una identidad clara y las apuestas tendientes a desarrollar un juego algo más ofensivo hasta el momento no terminan de resultar de acuerdo a sus expectativas.
Sin embargo, hay un aspecto en el que el entrenador santafesino sí ha encontrado regularidad: el plantel siempre le respondió en la cancha, en los momentos más difíciles. 
El  Verde enfrentó a Platense por segunda vez en el año. La ocasión anterior, en marzo, tuvo lugar en Vicente López, por la Copa de la Liga Profesional, y el DT del Calamar era entonces Juan Manuel Llop. Ayer, en el Eva Perón, al frente del conjunto visitante estuvo Leonardo Madelón, ya no Llop. Pero en Sarmiento, el DT sigue siendo Sciacqua.
El choque frente al conjunto de la Zona Norte de la provincia de Buenos Aires fue el tercer momento límite del ciclo Sciacqua, al frente del Verde, en la elite del fútbol argentino: el primero había sido el partido frente a Defensa y Justicia, por la sexta fecha del campeonato pasado, cuando el equipo de Junín venía de caer goleado por 6 a 0 contra Independiente y logró imponerse por 3 a 1 ante el Halcón de Varela, con varias bajas en la plantilla por un brote de Covid-19.
Luego, en la décima fecha, cuando Sarmiento llegaba al partido con Lanús en el Eva Perón luego de dos derrotas al hilo, ante Atlético Tucumán y Huracán. Fue victoria por 1 a 0 sobre los dirigidos por Luis Zubeldía, que llegaban con la chapa de haber sido finalistas de la Copa Sudamericana.
Ayer, la historia volvió a repetirse. Cuando todo indicaba que se trataba de una fecha clave para el porvenir del entrenador, el equipo respondió con deuda en el juego, pero con saldo positivo en cuanto a actitud. Un balance superavitario en un contexto definitorio. Una historia repetida, con final feliz para el DT de Sarmiento.

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