Messi definió con precisión el momento que vive el seleccionado.
ANÁLISIS

Renovación y pocos cambios

Se sigue esperando algo más de lo que ofreció la Selección en la noche santiagueña. El equipo no emociona ni cautiva más allá de los siete meses sin jugar, por el obligado impasse que marcó la pandemia de coronavirus, que no favorece para nada el entendimiento y la conformación de sociedades. 
A ello habría que agregarle otro tema que conspira para que la coordinación y el juego sean una cuenta pendiente: Lionel Scaloni ha propuesto 36 caras nuevas en el equipo nacional durante el año y nueve meses que lleva en el cargo.
Todo un record en materia de renovación que tuvo sus ejemplos también en el partido frente a Chile. Compartieron la titularidad, poniéndose por primera vez la celeste y blanca, Emiliano Martínez y Cristian Romero, éste último una de las figuras de la noche.
También saltaron al campo de juego como relevos Julián Álvarez y Nahuel Molina Lucero, otros dos estrenos. Los cuatro sumaron minutos por primera vez en el combinado nacional, mientras en el banco de los relevos esperó su oportunidad el debutante Buendía.
La identidad del equipo sigue siendo difusa y las acciones atractivas a cuentagotas. El propio Messi definió con precisión el momento que vive el seleccionado cuando, una vez sellado el empate, dijo que “Desde que empezaron las eliminatorias apuntamos a crecer como equipo".
"Debutaron varios chicos nuevos y de a poco nos tenemos que hacer fuertes otra vez. No es fácil lograr la dinámica después de tanto tiempo”. Una definición que apunta directamente al centro de la cuestión.
Y ya que recurrimos al rosarino para analizar el momento, con abundantes estrenos y caras nuevas, lo suyo fue de lo mejorcito en este compromiso del equipo nacional. Sin ser notable, la tarea desplegada por el capitán resultó la que más aportó al conjunto.
Tuvo además dos tiros libres que pudieron haber definido el pleito, uno bien resuelto por el arquero Claudio Bravo y otro que le sacó chispas al travesaño.
El partido sirvió además para que Lío –común en él- volviera a alimentar las estadísticas. 
Con el del jueves, a través de un tiro penal, llegó a los 72 goles e ingresó en el top ten entre los artilleros históricos de equipos nacionales. Encabeza ese escalafón el iraní Alí Danei con 109 y es escolta un viejo conocido del astro argentino, el portugués Cristiano Ronaldo con 103.
Más allá de esta renovación a fondo que viene practicando el DT no va a pasar mucho tiempo para que comiencen los reclamos sobre lo poco que genera el equipo, la necesidad de establecer una línea de juego y la elección definitiva de quienes serán los actores que darán pelea en la etapa clave que se avecina. 
Eliminatorias en la recta final de cara a Qatar 2022, una Copa América a la vuelta de la esquina y la necesidad de definiciones concretas deben formar parte de la agenda inmediata del responsable técnico de un equipo que, por ahora, sólo aporta chispazos.
Había que renovar, era imperioso hacerlo. Lo que no se viene cumpliendo es el cambio que necesita nuestro equipo mayor. Ahora, frente a compromisos cada vez más importantes, va llegando el tiempo de las definiciones.