Carlos Broitman, el abogado de la mujer que escondió bengalas en la cintura de su hija antes de ingresar al estadio de River en la fallida final de la Copa Libertadores, afirmó ayer que su defendida "nunca pondría en peligro la vida de su hija" y que está preocupada "por la repercusión mediática que tuvo el hecho".
La madre, de quien no se divulga su identidad para proteger a la menor, declaraba esta tarde ante la fiscal Adriana Bellavigna, titular de la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas número 6, quien inició una investigación de oficio al ver las imágenes que se viralizaron en las redes.
Broitman aseguró que "lo que se ve en el video son cascos de bengala, sin capacidad de hacer daño ni prenderse fuego" y destacó que "hay gente que al ver el video y luego de haberla reconocido la quiso linchar".
"Tratamos que la fiscal acepte nuevas medidas de prueba que le ofrecimos" relató el letrado y apuntó que la mujer "esta arrepentida de la repercusión que tuvo esto, están todos los organismos evaluando a la niña y a la familia".
Precisó que "son una familia de clase media a media baja, sin ningún tipo de antecedentes de este tipo. Ellos les gusta el fútbol y son fanáticos de River , pero no son 'Los borrachos del tablón' (por el nombre de la barra brava de River"
Agregó que pedirá la libertad de la mujer "porque nunca pudo haber puesto en riesgo la vida de su hija ni de terceros, al tiempo que pediré medidas de seguridad para ella por la repercusión mediática del hecho".
SUPERFINAL
COMENTARIOS