La selección juvenil venció a Rusia por 2-1 y se consagró en L´alcúdia
En épocas de golpes en mayores y de intentos de reconstrucción en juveniles, la selección argentina encontró un pequeño oasis en L’Alcúdia. El combinado Sub 20, dirigido por Lionel Scaloni, venció a Rusia por 2-1 y se consagró campeón en el tradicional certamen juvenil. Una alegría tras las últimas frustraciones y la mejor carta de presentación para Lionel Scaloni, que será el entrenador interino de la selección mayor hasta diciembre.
Rusia abrió el marcador de entrada, pero el golpe no afectó a los chicos argentinos. Minutos después, Facundo Colidio aprovechó un error del arquero rival tras un tiro libre de Gonzalo Maroni, y marcó el empate parcial. Igualdad que no se pudo quebrar en el tiempo regular y que llevó la final a suplementario. Ahí, la Argentina hizo la diferencia. Los rusos se quedaron con un jugador menos por la expulsión de Kisilev, y la selección encontró más espacios. Y fue Alan Marinelli quien aprovechó uno de esos huecos para conectar la pelota tras un centro de Mura desde la derecha al minuto del segundo tiempo suplementario. El tanto de Marinelli sentenció el partido y le dio el título a la Argentina.
“El objetivo era que los chicos se consoliden y que puedan tener una oportunidad en la mayor. La idea es buscar una identidad (...) de saber que la selección argentina es lo máximo. Que no existe Real Madrid, no existe nada. Y ellos lo entendieron, por lo que estamos orgullos de lo que hicieron. Trabajamos sólo ocho días con este grupo, los rusos están juntos hace cinco años”, dijo Scaloni.