None
Jorge Sampaoli.
ANÁLISIS

Final caliente de un ciclo para el olvido

Lo cierto, real y concreto es que las penurias para las selecciones siguen vivas. La nefasta experiencia del Mundial parece no haber sido suficiente para despertar de una vez por todas a los responsables del fútbol.

El fútbol sigue patas para arriba mientras asiste a una serie interminable de traumáticos capítulos protagonizados por los principales dirigentes de la AFA y el ex entrenador de la Selección. Cuando más se necesita de cordura y determinación se acentúan las diferencias, la cuerda se sigue tensando y el gran disparate armado en torno al equipo nacional parece no tener fin.
Uno de los fuertes diálogos mantenidos en las últimas horas marcan la rispidez reinante. Fue cuando Tapia le dijo a Sampaoli “Al torneo de L´Acundia del Sub 20 tenés que ir vos” a lo que el de Casilda respondió:
“Yo soy el técnico de la Mayor, no de la Sub 20. Le están dando a este torneo la importancia de una Champions League y es menor a un campeonato de chicos. Lo puede dirigir Scaloni, que vive a una hora de L’Alcundia”. Chiqui le devolvió la pelota: “El 25 de julio, a las 13, te tenés que presentar en Ezeiza para subirte al avión con los juveniles”.
El tenso entredicho marcó el final de una de las reuniones de los últimos días y el principio del fin para el entrenador del equipo que fue al Mundial. Sampaoli, que hasta hace unos días quería quedarse como sea en el cargo ha cambiado de opinión respecto al Sub 20: ahora está convencido que sería una mancha para su carrera calzarse el buzo de DT para un campeonato que no es reconocido por la FIFA, que se juega en césped sintético y en el que se pueden hacer hasta 11 cambios en cada partido.
Los que siguen de cerca la novela aseguran que “Sampa” cuando se fue de Ezeiza después de aquella discusión sabía que debía empezar a recoger sus cosas porque estaba atravesando sus últimas horas en la Selección. Es más, distintas fuentes dieron cuenta que estaba llegando al país Fernando Baredes, abogado del entrenador, para empezar a delinear los números de la salida.

Cuando más se necesita de cordura y determinación se acentúan las diferencias, la cuerda se sigue tensando y el gran disparate armado en torno al equipo nacional parece no tener fin.

Desde la vereda de la AFA aseguran que “el operativo desgaste está teniendo éxito”. Y mientras el santafesino, aunque con mucha menos intensidad, seguía insistiendo en que pretendía “una revancha”, los dirigentes siempre estuvieron absolutamente decididos a negársela. Tampoco estuvieron dispuestos a afrontar la millonaria cifra que desembocaría un despido: 8.624.000 dólares.
Mientras tanto se supo que el torneo juvenil, al que pretendían mandar a Sampaoli, se desarrollará entre el 28 de julio hasta el 8 de agosto y que de una nómina de 35 futbolistas solicitados los clubes rechazaron a casi una veintena de ellos. Increíble cuando estamos hablando de futbolistas con muy pocas apariciones en la divisional superior o que aún ni han debutado. O sea que son pocos los que están dispuestos a ceder sus jugadores por más que actualmente no hay actividad oficial en el país.
Distintas informaciones conocidas en las últimas horas dan cuenta que en la expectativa de Alberto Beccacece -autor del listado de 35 futbolistas cuando estaba a cargo del Sub 20--, figuraban jugadores del fútbol local, como Maroni y Almendra, de Boca; Lautaro Morales, arquero de Arsenal; Francisco Ortega, volante de Vélez; o Maxi Lovera, extremo de Rosario Central, quienes estuvieron en el Mundial de Rusia como sparrings del equipo caponeado por Messi.
También, en las estimaciones previas figuran algunos equipistas que militan en el exterior, como Facundo Colidio (Inter), Juan Agüero (Atlético de Madrid) o Nehuén Pérez, el defensor de Argentinos Júniors que acaba de contratar el Atlético de Madrid.
Lo cierto, real y concreto es que las penurias para las selecciones siguen vivas. La nefasta experiencia del Mundial parece no haber sido suficiente para despertar de una vez por todas a los responsables del fútbol. La coherencia, mientras tanto, sigue ausente del partido más difícil que afronta nuestro deporte más popular en mucho tiempo.

COMENTARIOS