Una definición tan inverosímil como bizarra se dio en una de las semifinales de la Copa de Tailandia, disputada entre Bangkok Sports Club y Satri Angthong, la cual se vio enmarcada por uno de los penales más locos de la historia.
Cuando la serie estaba empatada en ¡19-191!, el arquero del Bangkok remató de zurda y su tiro impactó en el travesaño. Hasta ahí todo normal y era el turno de que un jugador del Satri ejecute desde los doce pasos para avanzar a la finalísima. Sin embargo, había un capítulo más en este particular desenlace…
Tras pegar en el poste horizontal, la pelota tomó un raro efecto mientras el arquero del Satri festejaba y su colega del Bangkok se lamentaba, motivo por el cual se terminó metiendo dentro del arco y desató la locura de los fanáticos del elenco local.
Para colmo de males para la visita, el Satri erró su último disparo y el Bangkok avanzó a la cita decisiva del certamen.
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