Elías Tomizzi, fundador y entrenador de la escuela, junto a un discípulo.
EN LINCOLN

Kine BoxInteligente: la escuela que intenta abordar el boxeo desde otra perspectiva

La institución linqueña funciona hace tres años y es conducida por Elías Tomizzi. En la actualidad, el club cuenta con más de 100 alumnos y busca brindarles a cada uno de ellos la posibilidad de entrenar aplicando la ciencia y analizando las debilidades y fortalezas de cada niño.

Kine BoxInteligente es la escuela de boxeo que está ubicada en Lincoln, y es conducida por Elías Tomizzi. El club cuenta con más de 100 alumnos e intenta brindarles a cada uno de ellos la posibilidad de entrenar aplicando la ciencia y analizando las debilidades y fortalezas de cada niño.

La institución linqueña, situada en Avenida Maipú entre Drago y Alsina, funciona hace tres años, y cuenta con boxeadores que compiten de forma amateur. Además, el club se caracteriza por organizar veladas, donde se acercan una importante cantidad de personas para presenciar el evento que reúne a boxeadores de toda la zona. 

El último festival organizado por Kine BoxInteligente fue el 9 de junio, en Muta, y contó con 12 peleas amateurs y la presencia de 600 espectadores. Elías Tomizzi, fundador y entrenador de la escuela, habló con Democracia y explicó el nombre que lleva la institución y se refirió a la actualidad del club.

“Kine viene de Kinesiología, mi carrera de base; Box de boxeo e Inteligente porque intentamos cambiar paradigmas y entrenar los sistemas energéticos, analizar las debilidades y fortalezas y aplicar ciencia", indicó. “Hace 12 años que estoy inmerso en el boxeo. La escuela la abrí hace cuatro años aproximadamente. En la actualidad, contamos con algunos boxeadores que compiten de forma amateur”, contó.

“Muchos de los chicos que entrenan en “Kine” ya cuentan con licencia, mientras que otros tienen ganas de pasar al profesionalismo. La institución cuenta con 100 alumnos”, manifestó. Además de ser el DT de la escuela, Tomizzi, de 33 años, se recibió como kinesiólogo en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y es entrenador de la Federación Argentina de Box (FAB).

El impulsor y creador de la institución en Lincoln comentó cómo fueron sus primeros pasos como entrenador y sostuvo que “uno sueña con todo esto”. “Antes de abrir la escuela, les enseñaba boxeo a mis amigos, luego, al ver que las personas iban aumentado en gran medida, decidí crear el club”, recordó.

“La institución creció mucho, y, en la actualidad, tengo gente que está en lista de espera. Uno sueña con todo esto. Estoy a cargo de un establecimiento con 100 personas que se comprometen y empujan por la misma causa”, expresó.

Tomizzi contó el principal objetivo que se trazó antes de fundar el club y manifestó que “sueño que los chicos sean felices entrenando”. “La idea cuando abrí la escuela era formar personas, este deporte está vinculado a la cotidianidad y ayuda en lo social. Además, formar boxeadores también es parte del objetivo”, aseguró.

“Sueño que los chicos sean felices entrenando y compitiendo. Además, quiero pasar con algún boxeador al profesionalismo y luchar por título argentino o sudamericano”, dijo el kinesiólogo.

El entrenador oriundo de Lincoln comentó la rutina diaria que tiene la institución y explicó sobre las clases que les brinda a las categorías más chicas. “Entrenamos todos los días. Walter Olivera me ayuda en el club con la escuelita formativa, los chicos más pequeños no tienen contacto entre ellos, pero si aprenden las cuestiones básicas del deporte a través del juego”, declaró.

“La escuela tiene 15 boxeadores que compiten. Intentamos salir una o dos veces por mes a pelear afuera. Por suerte tenemos gente conocida que nos invitan”, afirmó. Tomizzi contó cuánto tiempo le lleva preparar una velada y expresó que “por suerte la gente nos acompaña”.

“Preparar una velada nos lleva dos meses. Buscó rivales con mucho tiempo de antelación para que se puedan preparar de la mejor forma posible”, indicó. “Los festivales de boxeo en Lincoln crecieron mucho, el público acompaña y le gusta ver lo que hacemos. Además, recibimos buenas críticas al respecto”, afirmó. “Tratamos de organizar dos veladas por año. Calculo que el próximo evento se desarrollará a fin de año. El clima de cada competición es familiar. Por suerte la gente nos acompaña, en el último festival se acercaron más de 600 personas”, comentó.

Por último, el creador de Kine BoxInteligente se refirió al equipo de gente que trabaja con él y habló sobre la importancia del boxeo y el club en su vida.

“El anhelo máximo fue el ring y por suerte lo pudimos adquirir. Tengo un equipo de gente que empuja y gracias a eso pudimos logar varios objetivos que nos lleva a trabajar cómodos”, manifestó. “El boxeo y el club ocupa un lugar importante en mi vida, no hay espacio de mi vida en el que no esté “Kine” presente. En Lincoln pase de ser Elías Tomizzi a el profe de box. Eso es algo que me enorgullece mucho”, concluyó.