Inobjetable victoria de Argentino de Junín
Superó en su casa a Olímpico por 89 a 78 y conservó el invicto como local.
Argentino sostiene una localía fuerte tras lograr una inobjetable victoria sobre Olímpico de La Banda por 89 a 78.
El Turco fue de menor a mayor en el partido. Le costó en el arranque dominar las marcas contra los grandotes rivales y sufrió los goles del juninense Damián Tintorelli y las penetraciones de Luciano Ortiz.
Sin embargo fue fuerte en la ofensiva logrando superar los veinte goles, lo que le permitió mantenerse expectante en el marcador. Bien Federico Mariani (1 doble, 4 simples), Facundo Zárate y los envíos externos de Juan Cangelosi y Jonatan Slider.
No hubo variación en cuanto al juego hacia el segundo cuarto. Argentino –que había quedado uno abajo- corrió de atrás pero no muy lejos de Olímpico. La visita se sostuvo con los impecables triples de Dmitry Flis –hasta que lo defendió Cangelosi y lo borró de la cancha- y los aportes de Lucas Ortiz-Alejandro Reyna que le dieron vigencia en el marcador llegando desde el banco.
En Argentino apreció Valentín Burgos (2 triples, 3 dobles) que se sumó a una noche impecable de Federico Mariani. El mismo Burgos con un triplazo dejó el juego en tablas 43 a 43 al cierre del primer tiempo.
La balanza comenzó a inclinarse para Argentino en el segundo tiempo. La defensa se raspó más y ya Olímpico no tuvo ofensivas tan cómodas. Con sacrificio y cerrando la pintura el Turco se hizo de varios rebotes importantes que le permitieron correr y allí radicó la estampida en el marcador. Valentín Burgos (2 triples, 1 simple) siguió con la mano caliente, Federico Mariani aportó lo suyo y en los minutos finales apareció Facundo Zártate (1 triple, 1 doble, 2 simples) con toda su experiencia para cerrar el cuarto con un triple 71 a 63.
No aflojó el azul en el inicio de los diez minutos finales. Federico Mariani (2 triples, 2 dobles), estupendo. Facundo Zárate castigando con un triple de un lado y del otro apareció Sebastián Uranga, que vio el hueco y la clavó limpita. Chau partido. Demasiada diferencia y Olímpico no tenía espacio físico para revertir el resultado. Había que esperar el sonido de la chicharra. Entraron los pibes y hubo fiesta en Las Morochas.