La comunidad de Junín y los simpatizantes del automovilismo volvieron a unirse ayer, en un emotivo acto en homenaje a Eusebio Marcilla, al cumplirse 68 años de su muerte, tras sufrir un accidente mientras disputaba la "V Vuelta de Santa Fe".
El encuentro se llevó a cabo en la plaza que lleva su nombre, ubicada entre las calles 12 de Octubre, Carlos Tejedor, Moisés Lebensohn y Julio Campos, con la presencia vecinos, agrupaciones vinculadas al deporte motor, instituciones locales y autoridades municipales.
La ceremonia comenzó con el izamiento de la bandera nacional, en el mástil recientemente restaurado, como preludio a la participación de los oradores, que coincidieron en la trascendencia del legado del "Caballero del Camino".
“Eusebio encendió en nosotros la pasión y el fervor por el automovilismo y, sobre todo en mi caso, por el Chevrolet. Hoy, por primera vez, en esta plaza se enarboló la bandera de la República Argentina, de la cual me siento honroso de ser uno de sus hijos, que era algo que hacía falta para que el homenaje sea completo”, expresó Benito Raúl Eguren, miembro de la Agrupación Eusebio Marcilla, entidad organizadora del acto.
“Eusebio era un ganador, pero no solamente en las carreras, sino fundamentalmente en la vida y a nivel humano. Quienes lo conocimos recordamos siempre su sonrisa plena y sus gestos de bondad. Siempre recuerdo, cuando tenía 10 años, nos hizo subir a su auto de carrera con unos amigos y nos llevó a dar unas vueltas”, recordó.
"Hasta el día de hoy lo sigo tomando como referencia para saber cómo debe comportarse la gente tanto en el deporte como en la vida. Siempre tendiendo un abrazo sincero, simple y con honestidad hacia el otro. Eso es lo que representa la figura de Eusebio y es lo que debemos transmitirles a los juninenses: ayudar al otro sin esperar nada a cambio”, insistió Eguren.
Luego, también se refirió a Marcilla el intendente Pablo Petrecca, quien agradeció el esfuerzo de la Agrupación por "mantener viva su memoria". "Es un orgullo y un honor poder participar de este nuevo aniversario, porque recordamos una vez más a un juninense que nos hizo, hace y hará sentir orgullosos por siempre”, reflexionó.
"Esta plaza, que lleva su nombre, es un espacio para que las familias vengan a disfrutar y los niños jueguen y se diviertan. Son todas cosas sencillas, que sin dudas están en relación con la sencillez y humildad con la que vivió Eusebio a lo largo de su vida", insistió Petrecca.
Finalmente, Edmundo Marcilla, sobrino del piloto y presidente de la Agrupación Eusebio Marcilla, reflexionó: “Esta historia comenzó en 1940, cuando tuvo buenos resultados tras correr cuatro carreras, pero sobre todo ahí se ganó el afecto de la gente. Gracias a él fue que Junín entró en la historia grande del automovilismo y del turismo carretera que era ya un patrimonio nacional que dejó su impronta a nivel sudamericano”.
“Ya en las primeras carreras sudamericanas, él tuvo el gesto de rescatar y dar una mano a sus adversarios ante cada incidente que se produjera, como sucedió con los hermanos Oscar y Juan Gálvez. Fue una constante en su vida y formaba parte de su forma de ser: un hombre simple, humilde y con un corazón enorme que se expresaba en los mínimos detalles”, destacó.
También formaron parte del acontecimiento Elena Virginia Marcilla, hija de Eusebio; Federico Alzari Marcilla, nieto del piloto; los legisladores provinciales Juan Fiorini y Laura Ricchini; el director de Deportes del municipio, Claudio Yópolo; y el presidente de la Federación de Comisiones de Fomento de Junín, Osvaldo Giapor.
Además, representantes del Colegio Marianista, el Club Junín, el Auto Moto Club Junín, el Automóvil Club Argentino, la Agrupación Autos Históricos de Junín, el “Chivo Club” de Junín, la Agrupación “Fana Falcon” y el “TC Retro Junín”.
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