None
DESPLEGO EN JUNIN UNA VARIADA ACTIVIDAD

Traverso habló sobre la importancia de contar con un autódromo y preservarlo en el tiempo

Destacó lo que aporta económicamente el automovilismo en categorías como el TC a las ciudades donde se realizan dichas competencias.

En la jornada de ayer llegó a nuestra ciudad Juan María Traverso quien desplegó una variada actividad. La primera de ellas fue una conferencia de prensa en el hotel Copahue, donde explicó que su presencia en Junín obedece a que «básicamente venimos a visitar clientes de Elf, a estar un rato con ellos, compartiendo un encuentro y también coincide con que yo tenía una visita pendiente con quienes están llevando adelante el tema del autódromo».

En diálogo con DEMOCRACIA, Traverso dijo en la oportunidad que el contar con el autódromo conlleva una responsabilidad para toda la comunidad.

Al respecto consideró que «hay una serie de cosas que han sucedido en los últimos años que van marcando cómo es el negocio del automovilismo. Estamos de acuerdo con la pasión que tenemos todos, pero obviamente es un negocio muy grande».

Tomó como base el turismo carretera, mencionando que dicha categoría «consume muchísimo dinero», porque «un auto de TC cuesta entre 80 y 100 mil pesos por carrera en la actualidad», señaló.

Mantenimiento a futuro

«Con esa necesidad de dinero para mantenerse, se necesita sponsor, recaudaciones y una serie de cosas. El turismo carretera necesita el cien por ciento de lo que genera dentro del autódromo para poder vivir», agregó.

Sostuvo que «el turismo carretera viene acá e instala dentro del autódromo un espectáculo de 40-50 millones de dólares. Obviamente se lleva todo lo que genera, pero a futuro es necesario realizar un mantenimiento del autódromo para evitar complicaciones y deterioros en el asfaltado».

Puso como ejemplo lo sucedido en Río Cuarto. «Un día -contó- había que reasfaltar la pista de Río Cuarto, el concesionario del autódromo no tenía los recursos, se hizo con material de segunda, se levantó la pista, vino la ACTC y lo clausuró. A partir de allí, todas las entidades de comercio le presentaron las quejas al intendente de porqué no había más automovilismo en Río Cuarto. Me convocan a una reunión con los comerciantes más importantes y el intendente.

Allí les expliqué y les dije que era una pena que se dieran cuenta que ahora les gustaba el automovilismo. Cuando llegaba el TC, se saturaba el restaurante, los hoteles, las estaciones de servicio se quedaban sin combustible, las carnicerías sin carne...

Les demostré con antecedentes reales, de que el turismo carretera les dejaba entre 8 y 10 millones de pesos por año a la comunidad de Río Cuarto y les dije que entre ellos y el intendente se fijarán cómo le devolvían de esa cantidad algo para que pusiera como correspondiera el autódromo y el Turismo Carretera volvió».

Traverso sostuvo que «mantener un autódromo no es cortarle el pasto y pintar, solo, sino prever el reasfaltado, que los reglamentos van cambiando y hay que modificarlo, poner más baños, agrandar los boxes, con lo cual se debe tener una entrada de dinero anual para hacer ese mantenimiento». Añadió que ese dinero «no se lo va a dar el automovilismo en forma directa, sino por la gente que llega por el TC que en esos cuatro días deja tres, cuatro o cinco millones de pesos en la ciudad. Cada vez que viene lo hace».

COMENTARIOS