UNA POSTAL CONSTANTE
La Terminal de ómnibus, un refugio para personas y animales sin techo en Junín
La llegada del frío incrementó la presencia de indigentes y perros que utilizan el lugar para dormir. En la estación de tren se da una situación similar.
Cuando el frío penetra en los huesos, pocos son los lugares que tienen los sin techo para refugiarse. Y la Terminal de ómnibus suele ser el centro de contención más accesible para indigentes y perros que deambulan por la Ciudad.
Prácticamente todas las noches, e incluso durante el día, se encuentran personas acostadas sobre cartones por los rincones y tapadas con frazadas. También es raro ver solo un can descansando o merodeando el lugar, ya que por lo general hay dos o tres, e incluso entre cinco o siete a la vez, tal como denunció un lector en el sitio web de Democracia.
A través de la sección Participación del diario, Pedro Rossi envió una foto en la que se contabilizan cinco perros –algunos se superponen en la imagen y denuncia que días atrás hubo una jauría entre siete animales que generaron molestias en varios de los presentes.
“La semana pasada esperando un micro me encontré con que la Terminal estaba llena de perros, todos con mal olor, molestando a los que estábamos ahí. Nos ladraban. En un momento nos tuvimos que correr. A una pasajera casi la muerden”, afirmó Rossi.
El lector dijo que en un momento la gente presente en el lugar intentó sacarlos afuera, pero volvían a ingresar cada vez que se abría una de las puertas.
“Se peleaban entre ellos. Teníamos miedo de que nos muerdan y nos infecten algo. No se podía estar”, se quejó.
Democracia se comunicó con personal de la Terminal, que reconoció la presencia de los canes, y dijeron que “todo el tiempo” están sacándolos del lugar. Aunque avisaron que los animales están vacunados, ya que cada vez que observan la presencia de uno nuevo llaman a Bromatología para que les brinden los cuidados elementales para su salud y la de las personas. También afirmaron que cuando se encuentra un perro enfermo, se lo llevan para curarlo.
Sobre las personas en situación de calle, las fuentes consultadas indicaron que algunas presentan problemas psiquiátricos, o de adicciones. En ese sentido, se pudo saber que incluso hay quienes cuentan con un hogar, pero viven a la intemperie hasta rechazando la ayuda de la Municipalidad, que en algunos casos les facilitó una pensión, indicaron.
Prácticamente todas las noches, e incluso durante el día, se encuentran personas acostadas sobre cartones por los rincones y tapadas con frazadas. También es raro ver solo un can descansando o merodeando el lugar, ya que por lo general hay dos o tres, e incluso entre cinco o siete a la vez, tal como denunció un lector en el sitio web de Democracia.
A través de la sección Participación del diario, Pedro Rossi envió una foto en la que se contabilizan cinco perros –algunos se superponen en la imagen y denuncia que días atrás hubo una jauría entre siete animales que generaron molestias en varios de los presentes.
“La semana pasada esperando un micro me encontré con que la Terminal estaba llena de perros, todos con mal olor, molestando a los que estábamos ahí. Nos ladraban. En un momento nos tuvimos que correr. A una pasajera casi la muerden”, afirmó Rossi.
El lector dijo que en un momento la gente presente en el lugar intentó sacarlos afuera, pero volvían a ingresar cada vez que se abría una de las puertas.
“Se peleaban entre ellos. Teníamos miedo de que nos muerdan y nos infecten algo. No se podía estar”, se quejó.
Democracia se comunicó con personal de la Terminal, que reconoció la presencia de los canes, y dijeron que “todo el tiempo” están sacándolos del lugar. Aunque avisaron que los animales están vacunados, ya que cada vez que observan la presencia de uno nuevo llaman a Bromatología para que les brinden los cuidados elementales para su salud y la de las personas. También afirmaron que cuando se encuentra un perro enfermo, se lo llevan para curarlo.
Sobre las personas en situación de calle, las fuentes consultadas indicaron que algunas presentan problemas psiquiátricos, o de adicciones. En ese sentido, se pudo saber que incluso hay quienes cuentan con un hogar, pero viven a la intemperie hasta rechazando la ayuda de la Municipalidad, que en algunos casos les facilitó una pensión, indicaron.