ANÁLISIS DEL TRÁNSITO
Kelly reconoció que “los agentes no son suficientes para ejercer una buena tarea”
“No llego a veinte inspectores”, dijo el titular de la Agencia Municipal de Seguridad Vial y recordó que cuando lanzaron el organismo comunal “tenía alrededor de 40 agentes”. Prometió acciones contra las picadas de motos.
El titular de la Agencia Municipal de Seguridad Vial (AMSV), Daniel Kelly, reconoció, ayer, en una entrevista con Democracia, que la cantidad de inspectores de tránsito con los que cuenta el área “no es suficiente para ejercer una buena tarea”, aunque resaltó el esfuerzo de los empleados para realizar un cúmulo de acciones bien diversas, tendientes a mejorar la seguridad vial en las calles juninenses, desde el control y los operativos a la concientización y el trabajo a la salida de las escuelas.
“Se han ido muchísimos inspectores”, lamentó Kelly. “Hoy no llego a veinte agentes”, completó.
Es que la AMSV, según repasó el funcionario comunal, se encarga de los controles callejeros, guardias en el centro y en la zona de bancos, el ordenamiento del tránsito a la salida de los colegios y jardines, el control del tránsito pesado, las fotomultas, los cursos de educación vial para los cuales se asigna diariamente a un empleado.
“Antes tenía alrededor de 40 inspectores. Hacíamos entre ocho y diez operativos diarios, y hoy sólo podemos hacer dos o tres”, afirmó. “Tengo tanta gente asignada a distintas tareas, que después no tengo suficientes agentes para hacer los operativos”, dijo.
Las faltas más frecuentes
En promedio, según manifestó el responsable de la Agencia, se labran en Junín entre 1500 y 2000 infracciones semanales.
Entre las faltas más frecuentes que cometen los juninenses Kelly mencionó la violación de la luz roja en los cruces semaforizados; girar en lugares no permitidos; estacionar en las ochavas o en sitios prohibidos como la zona bancaria; y circular sin la documentación correspondiente (carnet de conducir, tarjeta verde, seguro del rodado al día).
“Además vemos a muchos motociclistas sin casco”, agregó.
Las picadas…
Sobre las bandas motorizadas que, como publicó Democracia, reaparecieron el domingo último en distintos puntos de la ciudad, Kelly afirmó: “Nos sustrajeron un cono y aparentemente tendrían la intención de volver a aparecer, pero vamos a endurecer los controles y tenemos todo el apoyo de la policía”.
“Vamos a volver a cerrar la avenida San Martín si hace falta”, prometió.
Datos alarmantes
El flagelo de la inseguridad vial en el ámbito local arroja números escalofriantes: más de 1.800 accidentes de tránsito sólo durante 2013 –según datos obtenidos por este diario de la empresa de emergencias médicas Intermed-; 50.000 motos y ciclomotores en el parque vehicular juninense (a razón de una moto cada dos habitantes –en Junín hay casi 100 mil habitantes); 23 personas fallecidas el año pasado en choques en el casco urbano; el 90 por ciento de los siniestros deja lesionados, muchos de ellos, con secuelas de por vida, que insumen un enorme gasto al Estado.
Calles y arterias en mal estado se suman a una cantidad desproporcionada de motos que, como informó este diario, supera el total de tres ciudades de la región juntas. En esta línea, mientras que en Chivilcoy hay unas 21.000 unidades; en Pergamino 20.000; y en Chacabuco 6.000, en nuestra ciudad ya se superó la marca de las 50.000. Sin embargo, en todas las ciudades la circulación de motocicletas configura un tema de preocupación.
“Se han ido muchísimos inspectores”, lamentó Kelly. “Hoy no llego a veinte agentes”, completó.
Es que la AMSV, según repasó el funcionario comunal, se encarga de los controles callejeros, guardias en el centro y en la zona de bancos, el ordenamiento del tránsito a la salida de los colegios y jardines, el control del tránsito pesado, las fotomultas, los cursos de educación vial para los cuales se asigna diariamente a un empleado.
“Antes tenía alrededor de 40 inspectores. Hacíamos entre ocho y diez operativos diarios, y hoy sólo podemos hacer dos o tres”, afirmó. “Tengo tanta gente asignada a distintas tareas, que después no tengo suficientes agentes para hacer los operativos”, dijo.
Las faltas más frecuentes
En promedio, según manifestó el responsable de la Agencia, se labran en Junín entre 1500 y 2000 infracciones semanales.
Entre las faltas más frecuentes que cometen los juninenses Kelly mencionó la violación de la luz roja en los cruces semaforizados; girar en lugares no permitidos; estacionar en las ochavas o en sitios prohibidos como la zona bancaria; y circular sin la documentación correspondiente (carnet de conducir, tarjeta verde, seguro del rodado al día).
“Además vemos a muchos motociclistas sin casco”, agregó.
Las picadas…
Sobre las bandas motorizadas que, como publicó Democracia, reaparecieron el domingo último en distintos puntos de la ciudad, Kelly afirmó: “Nos sustrajeron un cono y aparentemente tendrían la intención de volver a aparecer, pero vamos a endurecer los controles y tenemos todo el apoyo de la policía”.
“Vamos a volver a cerrar la avenida San Martín si hace falta”, prometió.
Datos alarmantes
El flagelo de la inseguridad vial en el ámbito local arroja números escalofriantes: más de 1.800 accidentes de tránsito sólo durante 2013 –según datos obtenidos por este diario de la empresa de emergencias médicas Intermed-; 50.000 motos y ciclomotores en el parque vehicular juninense (a razón de una moto cada dos habitantes –en Junín hay casi 100 mil habitantes); 23 personas fallecidas el año pasado en choques en el casco urbano; el 90 por ciento de los siniestros deja lesionados, muchos de ellos, con secuelas de por vida, que insumen un enorme gasto al Estado.
Calles y arterias en mal estado se suman a una cantidad desproporcionada de motos que, como informó este diario, supera el total de tres ciudades de la región juntas. En esta línea, mientras que en Chivilcoy hay unas 21.000 unidades; en Pergamino 20.000; y en Chacabuco 6.000, en nuestra ciudad ya se superó la marca de las 50.000. Sin embargo, en todas las ciudades la circulación de motocicletas configura un tema de preocupación.